Cuando este martes el árbitro pite el final de la ida de las semifinales de la Liga de Campeones entre el Manchester City y el Real Madrid, faltarán pocas horas para que se cumplan diez años del día en el que Pep Guardiola anunció su adiós como técnico del FC Barcelona, una etapa dorada que el club azulgrana recuerda con nostalgia mientras busca el camino que le devuelva al éxito.
El 27 de abril de 2012 saltó una doble noticia en el seno de la entidad catalana. Guardiola hacía público que dejaba el banquillo a finales de temporada y, en la misma comparecencia, el entonces presidente del club Sandro Rosell desvelaba que el segundo entrenador Tito Vilanova sería su relevo.
"Me he desgastado, me he vaciado y necesito llenarme", argumentó el técnico de Santpedor para explicar su decisión en una sala de prensa del Camp Nou abarrotada de periodistas, directivos y jugadores como Carles Puyol, Xavi Hernández, Víctor Valdés, Cesc Fàbregas, Gerard Piqué, Sergio Busquets y Pedro.
De aquella plantilla solo quedan Piqué y Busquets, titulares indiscutibles, el renacido Dani Alves, Sergi Roberto, que por aquel entonces tenía ficha del filial, y Xavi Hernández, última esperanza en el banquillo para rescatar el frasco de las esencias de un equipo que en los cuatro años de Guardiola como técnico dejó huella en forma de títulos -14 de 19 posibles- y un estilo de juego único.
"Gracias Pep por haber perfeccionado un modelo futbolístico que nunca más podrá ser cuestionado", destacó Sandro Rosell en su mensaje de agradecimiento al preparador catalán.
A pesar de los 16 entorchados que el Barça ha levantado en la última década, la profecía sobre el modelo futbolístico que anunció hace dos lustros Rosell no se ha cumplido. Lo confirma el discurso actual de Xavi Hernández que, pocas semanas después de asumir el cargo de entrenador del Barça, admitía que a sus jugadores les "cuesta entender el juego de posición" que implementó Johan Cruyff y actualizó Pep Guardiola.
Desde el adiós del técnico de Santpedor, por el Camp Nou han pasado siete entrenadores: Tito Vilanova, que sólo estuvo un curso (2012-13) debido a la enfermedad que padeció, Gerardo 'Tata' Martino (2013-14), Luis Enrique Martínez (2014-17), Ernesto Valverde (2017-20), Quique Setién (2020), Ronald Koeman (2020-21) y Xavi Hernández, que dirige la nave del primer equipo desde noviembre 2021.
El Barça, bajo la jerarquía futbolística de Leo Messi, ha seguido ganando títulos -mención especial merece el triplete del curso 2014-15 con Luis Enrique- pero ha padecido un involución futbolística que se evidencia con las debacles sufridas en la Liga de Campeones ante el Juventus (2016-17), el Roma (2017-18), el Liverpool (2018-19), el Bayern Múnich (2019-20) y el París Saint-Germain (2020-21).
Este curso, el que hace diez del adiós de Guardiola, el equipo azulgrana -sin Messi ni dinero en la caja- ha quedado apeado de los octavos de final de la máxima competición europea veinte años después y lucha por acabar LaLiga entre los cuatro primeros clasificados.
Mientras el Barça perdía el norte, Guardiola exportaba con éxito su modelo en constante evolución en la Bundesliga y en la Premier League inglesa. En su primera etapa lejos del Camp Nou dirigiendo al Bayern Múnich (2013-16) conquistó tres ligas (2013-14, 2014-15 y 2015-16), dos Copas (2013-14 y 2015-16), además de la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes logrados en 2013.
Tras la experiencia alemana, el técnico voló hasta el Reino Unido donde ha sentado cátedra con diez títulos en casi seis años dirigiendo al Manchester City: tres Premier League (2017-18, 2018-19 y 2020-21), cuatro Copas de la Liga (2017-18, 2018-19, 2019-20 y 2020-21), dos Community Shield (2018 y 2019) y una FA Cup (2019).
El único título que se le resiste en los últimos diez años es la Liga de Campeones, que ya ganó en dos ocasiones con el Barcelona (2008-09 y 2010-11).
El curso pasado se quedó con la miel en los labios contra el Chelsea (0-1) y en el presente busca el billete para disputar la segunda final consecutiva en la eliminatoria contra el Real Madrid, un viejo conocido que en la temporada 2010-11 ya superó en la misma ronda de la 'Champions', cuando el Barça competía y ganaba con un fútbol total que sigue guardado en el baúl de los recuerdos.