El FC Barcelona logró el pasado domingo una agónica victoria contra el Mallorca en el que el equipo culé sufrió hasta el final. Xavi apostó por un once con algunas inesperadas rotaciones y uno de ellos completó un auténtico partidazo abriendo la lata de un partido en el que la exigencia, dadas las pocas jornadas que quedan, era máxima. Tras el encuentro, el técnico culé no parece tener claro su futuro y su continuidad en el Camp Nou aún es incierto. Se trata del delantero neerlandés Memphis Depay.
Cuando a un equipo como el Barça se le atraganta está clase de partidos, las estrellas deben dar un paso adelante. Memphis no estaba en su mejor momento ya que el ariete apenas contaba con la confianza de Xavi por el desplome de sus cifras goleadoras. Aún así, el técnico catalán decidió ponerle en el once y dar descanso a Ousmane Dembelé, una oportunidad de oro para reivindicarse.
El exjugador del Olympique de Lyon fue una de las mejores cartas que tuvo el Barça sobre el campo. Cuando al equipo culé parecía que se le hacía el partido cuesta arriba, algo que ya se había visto en los últimos partidos en el Camp Nou, Depay demostró ser un delantero de mucha calidad. El holandés abrió el resultado tras un desmarque descomunal que hizo que sólo tuviera que rematar a placer para que Sergio Rico solo pudiera seguir con la mirada.
Además, su actitud y carácter en el partido mostraba el entusiasmo por demostrar lo que vale y que merece más oportunidades de las que le ha otorgado Xavi desde que sustituyó a Ronald Koeman.
Xavi sólo tiene en mente, por ahora, afianzar la segunda plaza que le permita jugar la Champions y la Supercopa de España la temporada que viene. Sin embargo, su gran quebradero de cabeza es confeccionar quienes encabezarán el nuevo proyecto del Barça. En un principio, el nombre del holandés estaba apuntado en la lista de transferibles para hacer caja en el próximo mercado de fichajes.
Su titularidad frente al equipo balear apuntaba a ser una fórmula para que Memphis pudiera volver a su mejor versión y lucirse para así sacar más dinero por él. El delantero llegó libre el año pasado de la mano de Koeman y su valor de mercado actual está alrededor de los 45 millones de euros, unas cifras muy atractivas para las arcas culés.
Sin embargo, los números de Depay en la primera vuelta de la temporada aún despiertan dudas entre el cuerpo técnico. Con su gol el pasado domingo, volvió a recuperar el puesto de pichichi del equipo con 11 dianas, superando a Aubameyang (10 goles), quien lleva desde enero en el equipo culé.
Una razón para explicar el bajón del holandés fueron las continuas lesiones que lleva arrastrando desde el mes de enero, motivo por el que Laporta tuvo que ir al mercado invernal a buscar hombres que jugasen arriba. Xavi sabe que Memphis es un delantero de mucha calidad que puede llegar a ser una pieza clave. Sin embargo, jugadores como Ansu Fati, quien acaba de volver de lesión, Dembelé o Ferrán Torres están muy por delante de él. El Barça necesita dinero y Xavi sabe que, si llega una oferta atractiva, dará luz verde a la operación y el holandés deberá marcharse.