El Conde de Godó está siendo uno de los principales eventos deportivos de la semana y para los rostros más conocidos de la Ciudad Condal es uno de los must estos días. Joan Laporta, el presidente del FC Barcelona, no podía perderse la cita y el jueves se pasó por las instalaciones del RCTB para vivir el encuentro entre Jordan Thompson y Casper Ruud. Aunque su llegada se complicó más de la cuenta. La escena, que no tiene desperdicio, en el vídeo que encabeza esta noticia.
El dirigente del club blaugrana llegó al lugar rodeado de periodistas, que buscaban una declaración del protagonista dos días después de la derrota ante el Paris Saint-Germain en Champions. Pero, como Joan decía, no era “ni el momento ni el lugar” de hacerlo. Y con esa idea continuó durante toda la tarde… hasta que llegó la 'infiltrada' de la prensa.
Lo primero que tenía que hacer el ‘presi’ culé era localizar la puerta de acceso, que no fue fácil. Una vez que estaba todo controlado, para dentro. “¡Un momento! ¿Por qué hay tanta gente esperando a la puerta?”, debió pensar nuestro protagonista. Pues bien, el encuentro estaba en pleno juego y, como es habitual en los torneos de tenis para no desconcentrar a los tenistas, hasta que no se acaba el juego, las gradas deben permanecer inmóviles, sin aficionados entrando o saliendo.
Más de diez minutos tuvo que esperar allí Laporta. Y no solo eso, sino que, además, lo tuvo que hacer delante de todos los periodistas, ansiosos por conseguir arrancarle unas palabras. “Si somos pacíficos, no pasa nada. Me preguntan y es un poco violento porque yo no contesto. Me gustaría contestaros…”, confesaba el directivo del Barça.
Y ante la imposibilidad de atender a la prensa, Joan se daba la vuelta y se inducía en conversaciones con sus acompañantes. Hasta que apareció la única persona capaz de sonsacarle alguna declaración: una aficionada del equipo de la Ciudad Condal.
“Pasando la decepción”, respondía Laporta a la mujer, que le preguntaba que cómo se encontraba. “Sabe mal porque habíamos depositado muchas ilusiones. Estábamos muy ilusionados. Ahora nada, a pasar esta decepción a ir a Madrid a ganar”, pronunciaba el presidente.
Haciendo gala de su gran sentido del humor, Joan se acercó a la prensa y dijo: “¿Has visto la moralidad?”, en relación con su actitud agradable con la ‘infiltrada de la prensa’ que había logrado, por fin, regalar a los periodistas un testimonio del máximo mandatario culé. “Mira la paradoja: esperando a que abran la-porta (en castellano, la puerta)”, expresaba Laporta entre risas.
Ya faltaba poco para que Joan pudiese entrar a disfrutar del encuentro de tenis –que, por cierto, ganó Casper Ruud de forma muy holgada (6-1, 6-4)–. Aunque antes, uno de los aficionados allí presentes nos regaló un gran dato acerca del desarrollo del torneo. Y es que, en esta edición, por primera vez desde 1989 ningún español ha conseguido alcanzar la ronda de cuartos de final del Torneo Conde de Godó de Barcelona.
Con una lección nueva para Joan, ahora sí, llegaba el momento de cruzar la puerta, despedirse de sus amigos, los periodistas, y dejar atrás la gran odisea en el RCTB.