El Levante UD ha pisado el acelerador para reforzar su ataque con sus dos principales prioridades, que son el extremo izquierdo del Chelsea Christian Atsu y el delantero de la Fiorentina Giuseppe Rossi. Tanto que Quico Catalán y Manolo Salvador desean que alguna de estas dos operaciones quede cerrada esta misma semana para que Rubi tenga otro refuerzo a su disposición a partir del inicio de la próxima.
El presidente y el director deportivo, junto con Rubi, con muy conscientes de las necesidades que tiene el equipo, que ha cerrado con 14 puntos la primera vuelta del campeonato y que, por tanto, tiene mucho que mejorar si quiere tener posibilidades reales de conseguir el objetivo de la permanencia a final de campaña. Y por ello la llegada de los refuerzos no se puede demorar mucho más y por supuesto que no puede apurarse hasta el 31 de enero, como ha sucedido en años anteriores, o por lo menos no se pueden dejar todas las operaciones para el final.
En estos momentos, no se sabe cuál de los dos futbolistas puede cerrarse antes o incluso si al final no aterrizará en el Ciutat de València ninguno de los dos. La sensación que existe es más optimista respecto a la incorporación de Rossi aunque puede demorarse más en el tiempo y apurarse los plazos, mientras que respecto a Atsu es diferente: ahora mismo la temperatura de la operación es más fría pero la respuesta sobre la llegada o no del ghanés se sabrá antes, puede que en horas. Eso a última hora de ayer jueves aunque el mercado da muchos bandazos y se han visto operaciones muy complicadas que han terminado cerrándose y otras que estaban a la mano y se esfumaron finalmente.