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Con Comandante pero sin capitán

Javier Mínguez

Ipurua fue testigo de una de las peores versiones del Levante UD de la presente temporada, justo en un momento crucial en que los de Rubi y el propio técnico tenían que dar el do de pecho y un golpe sobre la mesa en la pelea por la permanencia. Un partido en el que todo fue de cara para el Eibar, incluido el arbitraje, ya que los dos goles del conjunto de Mendilibar tendrían que haber sido invalidados: el primero por fuera de juego y el segundo por falta sobre Diego Mariño. Sin embargo, los jugadores levantinistas no protestaron, al menos de forma ostensible al colegiado.

En el 1-0, Inui estaba en fuera de juego cuando recibió el balón largo de Jota Peleteiro pero el juez de línea no levantó el banderín y esto posibilitó que el japonés, en un genial pase al primer toque, habilitase a Borja Bastón para batir a Diego Mariño. Precisamente, el portero del Levante fue protagonista por desgracia en el segundo tanto ya que fue arrollado por Adrián después de rematar, lo que imposibilitó que tuviera la posibilidad de levantarse para intentar atrapar el balón. En el primer tanto del Eibar hubo leves protestas por el off-side mientras que en el segundo tan sólo el cancerbero y jugadores desde la distancia protestaron a Estrada Fernández.
Además de los errores arbitrales, el Levante estuvo totalmente carente de carácter pese a ser un partido en el que prácticamente se jugaba la vida. El capitán 'titular' del equipo, Juanfran, se quedó fuera de la convocatoria por lesión por culpa de una elongación que se produjo en el último entrenamiento antes del partido frente al Sevilla. Morales se autoproclamó 'Comandante' del equipo hace unas semanas y cumplió sobre el terreno de juego y necesita que más gente se una a su causa.
 

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