La incorporación de Iván Villar como cedido procedente del Celta, una operación que el Levante UD y los vigueses están cerca de cerrar, será el último (teóricamente) capítulo del culebrón en que se ha convertido la portería granota en los últimos dos años. Y es que, si se confirma el aterrizaje del joven internacional sub 21, habrán sido hasta seis los futbolistas que habrán desfilado por el marco azulgrana, por unos motivos o por otros, en estos dos ejercicios. Con la llegada del hasta ahora arquero celeste, se quedará todavía por cubrir la posición que más le urge al entrenador como es la del delantero.
Iván será otro inquilino para un marco azulgrana por el que han desfilado, desde el verano de 2016, varios protagonistas: desde Álex Remiro hasta Mitch Langerak, pasando por Raúl Fernández, Koke Vegas y Oier Olazabal hasta, finalmente, el epílogo que teóricamente pondrá el gallego. El primero en ponerse bajo palos a las órdenes de Muñiz fue precisamente el primero en coger la puerta de salida en este ciclo. Álex Remiro llegó también con la vitola de ser miembro de la 'Rojita' pero, tras unas actuaciones cuestionables, perdió su puesto en la titularidad.
Una aparición fugaz la tuvo Koke Vegas en la tercera jornada de la pasada 2016-17 frente al Nàstic de Tarragona, por la ausencia del navarro por un compromiso internacional y unas molestias de Raúl Fernández. El malagueño es considerado, o al menos así lo han reiterado desde la dirección deportiva como desde el cuerpo técnico, el portero "del futuro" del Levante UD aunque eso no haya sido óbice para que se pasase más de la mitad de la pasada temporada en blanco entre el primer equipo y el filial. En esta 2017-18, fue cedido al Alcoyano para que tuviera minutos de calidad y, ahora que se había hecho con el puesto en el conjunto alicantino, ha sido llamado de nuevo a las filas granotas.
El tercer futbolista en ocupar la portería del conjunto de Orriols ha sido el más duradero y el mas reconocido. No en vano, Raúl Fernández fue proclamado Trofeo Zamora de la campaña 2016-17 en Segunda División y uno de los protagonistas en un ascenso, por lo demás, muy coral. El bilbaíno arrancó de nuevo en la titularidad en este ejercicio pero, en la jornada 12, Muñiz sorprendió relegándolo en beneficio de Oier Olazabal en la victoria por 0-2 frente a la UD Las Palmas y, todo hay que decirlo, se ha revelado como el jugador más en forma de la escuadra del Ciutat de València.
El quinto nombre de este enredo es Mitch Langerak, por el que se hizo una apuesta fuerte el pasado verano, pagándole 600.000 euros al Stuttgart para hacerse con sus servicios, pero se ha tenido que conformar con un partido de Copa frente al Girona y su traspaso por 1,3 kilos al Nagoya Grampus de la liga de Japón. La venta del australiano se produjo el 14 de enero y se anunció curiosamente una hora antes de la disputa del encuentro ante el Celta. Un día después, Raúl Fernández no se ejercitaba con el grupo por unos problemas en la cadera y se disparaban todas las alarmas, justificadas ya que una semana después decidió pasar por el quirófano.
Pese a todos estos movimientos poco habituales en la portería de un equipo, la dirección deportiva se movió rápido y está a punto de cerrar la llegada de Iván Villar. En total, seis inquilinos para una portería que, eso sí, siempre ha estado bien cubierta en estos dos años de dirección deportiva de Tito y Carmelo.