El Espanyol de Rubi parece haber tomado la delantera en la puja por Borja Iglesias. El delantero deseado por el Levante UD, entre otros equipos, es la prioridad del renovado conjunto perico de cara a sustituir a Gerard Moreno, recientemente traspasado al Villarreal de cara al próximo curso. El que fuera entrenador del Levante UD se desplazará a China para dar forma a la planificación de cara al próximo curso, marcando al ariete celeste como una de las prioridades para reforzar el frente de ataque.
El jugador, cedido la pasada temporada en el Real Zaragoza, deberá volver al Celta de cara al próximo curso con el que le queda un año de contrato, hasta 2019, con una cláusula de rescisión cifrada en 10 millones de euros.
"No sé que deparará el futuro, gracias a la temporada que hemos hecho tengo distintas posibilidades y las afronto todas con mucha ilusión, ojalá pueda jugar en Primera División", respondió Borja al ser preguntado por su futuro en una entrevista en Aragón Radio días atrás.
Aunque matizó que "la realidad es que a día de hoy soy jugador del Celta, tengo un año y en principio tengo que volver allí".
El conjunto de Orriols conoce las condiciones del jugador, cuya cláusula de rescisión es de 10 millones de euros y un contrato que expira el próximo curso. Iglesias tiene una oferta de renovación por parte del Celta por cinco temporadas, a razón de un millón por cada una de ellas, pero no parece por la labor de ampliar una vinculación que expira en 2019. Por lo que el cotizado delantero que rompió el molde en Segunda División B con 34 goles y la categoría de plata con 23 dianas, quiere seguir quemando etapas en el mundo del fútbol y golear en la élite del fútbol español.
Borja Iglesias, por su parte, es consciente de que la presencia de Iago Aspas y Maxi Gómez complica sus opciones en el conjunto celeste pese al cambio en el banquillo. Por lo que el delantero es consciente de que una salida la abriría realmente las puertas de mostrar su fútbol en Primera División.