Sergio García era uno de los hombres con más calidad, si no el que más, sobre el césped del RCDE Stadium y quizá por ello el Levante UD fue derrotado por el Espanyol en lo que supuso la segunda vez que los granotas hincaron la rodilla (1-0). Porque el partido fue muy disputado e igualado en cuanto a ocasiones e intervenciones de Oier Olazabal y Diego López pero la figura del exdelantero del Levante UD emergió para castigar uno de los pocos errores del equipo de Paco López.