Si había dudas sobre quién debía ser el portero titular del Levante UD esta temporada, han quedado disipadas gracias a las actuaciones de Aitor Fernández. Además de una buena pretemporada, el guardameta vasco se ha ganado el puesto bajo palos gracias a sus grandes paradas en las primeras jornadas.
Aitor Fernández jugó prácticamente todos los encuentros de preparación de la nueva campaña. En la misma, el Levante tan solo perdió dos encuentros, símbolo inequívoco de la efectividad de los porteros azulgranas. Con esto, y después de acabar el pasado curso como titular, el vasco ha continuado al mando de la portería granota.
Bien es cierto que en el partido frente al Alavés en Mendizorroza el portero apenas tuvo trabajo y no se pudieron ver sus habilidades bajo palos. En el único gol del encuentro, incluso llegó a detener el balón en primera instancia, aunque lo hizo cuando este ya había sobrepasado la totalidad de la línea. En el resto de partido, logró despejar las pocas llegadas de los locales.
La segunda jornada fue completamente diferente para Aitor Fernández. La defensa no estuvo del todo acertada en la primera mitad, por lo que tuvo que vérselas en varias ocasiones con un Toko Ekambi imparable. Pese a que no pudo evitar el tanto de Gerard en los primeros minutos, sí que mantuvo al submarino amarillo al margen el resto de minutos.
Logró detener todos los disparos de Ekambi, ya fuesen lejanos o a bocajarro. Así continuó todo el encuentro, pues el Villarreal no dio tregua. Sin embargo, la parada del encuentro fue sin duda en los últimos minutos. Con el Levante rozando los tres puntos con la yema de los dedos, Ontiveros se animó con un disparo lejano, pero Aitor volvió a volar para sacar una mano salvadora para su equipo. Con esto, evitaba el empate y daba los primeros tres puntos de la temporada a los de Orriols.