Con el mercado de fichajes a una semana de cerrar, parece ser que el Levante UD todavía tiene alguna palabra que decir. Según han informado los periódicos Marca y Superdeporte, los de Orriols podrían terminar de cerrar un trueque con el Girona en la portería. Yassine Bounou, Bono, pasaría a ser el guardameta azulgrana, mientras que Oier se marcharía a Montilivi.
Tras el descenso a Segunda División, el conjunto catalán no puede asumir el sueldo que ostenta el portero marroquí. Sin embargo, quién tiene la última palabra en el acuerdo es Oier, que debería aceptar salir al Girona. La situación de ambos guardametas es bien distinta, pues Bono terminó las últimas temporadas como titular, mientras que el vasco la perdió a manos de Aitor Fernández.
En caso de que las negociaciones, que han estado bastante paradas en este último mes, llegasen a buen puerto, Oier saldría en calidad de cedido. Sin embargo, en caso de un nuevo ascenso, habría una clausula que obligaría a los rojiblancos a ejercer la opción de compra sobre el arquero.
Si finalmente ambos clubes no llegan a ningún acuerdo, el Levante quedará en mejor posición. Esto se debe a que el cuerpo técnico granota está satisfecho con sus porteros, por lo que mantener a Oier no sería ningún impedimento. El Girona, por su parte, sí que deberá buscar una salida a Bono antes del próximo lunes.
El fair-play está siendo una complicación para los de Orriols en este mercado de fichajes. Dado esto, los granotas necesitan sacar jugadores de la plantilla para poder inscribir al resto y continuar fichando, como es el caso de Radoja, que todavía no está inscrito como azulgrana.
En total, los levantinistas tienen a cinco jugadores en la rampa de salida: Antonio Luna, Armando Sadiku, Sanjin Prcic e Iván López. Todos ellos han disputado muy pocos minutos esta pretemporada, o ninguno en algunos casos, por lo que se espera que salgan a lo largo de esta semana.