El Levante UD peleará por un puesto en la final de Copa del Rey ante el Athletic Club en una eliminatoria de semifinales que disputará su primera entrega en San Mamés y que decidirá todo en el Ciutat de València. Sin lugar a dudas, un momento histórico para ambos conjuntos, aunque sobre todo para el Levante, que se ha colado como invitado de excepción en la fiesta del fútbol español. En el torneo del K.O. tan sólo existe un precedente entre ambos conjuntos y hay que remontarse a los años 40 para encontrarlo. En 1947, Athletic Club y Levante se enfrentaron en los octavos de final de la que, por aquel entonces se conocía como la Copa del Generalísimo.
En aquella eliminatoria el triunfo fue para los vizcaínos gracias a la goleada en el partido de ida disputado en Bilbao. El Athletic Club se impuso al Levante por 6-2 con los seis tantos del mismo jugador, Panizo. Por parte del Levante marcaron Fayos y Salvador.
En el partido de vuelta, una semana después, el Levante se impuso 4-2. El resultado no fue suficiente para darle la vuelta al marcador tras el recital goleador de Panizo. Los granotas se quedaron con la miel en los labios tras lo goles de Martínez Català, Botella y el doblete de Escrivà y se despidieron de la competición.
El Levante UD logró este miércoles en el Ciutat de València ante el Villarreal la clasificación para la semifinal de la Copa del Rey por segunda vez en su historia, pero la primera con su actual denominación. Y es que, la única vez que el Levante, en sus más de 110 años de historia, alcanzó la semifinal en este torneo fue en la temporada 34-35 tras empatar en los dos partidos de cuartos ante el Barcelona e imponerse por 3-0 en el desempate celebrado en Zaragoza.
Aquella semifinal, sin embargo, la perdió ante el Sabadell, ante el que cayó en la ida por 1-2 en València y por 2-0 en la vuelta en la ciudad catalana, cuando la denominación del club era todavía la de Levante FC.