Tremendo ridículo en el día más importante

El bochorno que tuvieron que soportar los levantinistas que acudieron al Ciutat de València este lunes primero de noviembre fue doblemente duro tras la pequeña esperanza que comenzó a germinar en los corazones granotas tras el empate ante el Atlético de Madrid el pasado jueves. Se esperaba un Levante UD que diese el do de pecho ante un rival directo como el Granada, sin embargo, el día más importante, el Levante fue toda una lágrima, presa de su inoperancia y de los errores grotescos en defensa. Germán, Luis Suárez y Antonio Puertas no desaprovecharon el recital de regalos y dejaron al levantinismo hundido en el descenso y lo peor de todo, sin conocer la victoria y sin soluciones cuando ya se ha disputado un tercio de LaLiga Santander.

El Levante arrancó el duelo como un tiro, en busca de un primer tanto para dar continuidad a las buenas sensaciones con las que terminó el último partido ante el Atlético de Madrid. Los granotas pronto se plantaron con peligro en el área rival. Apenas se habían disputado un par de minutos cuando la presión de Morales y Soldado surtió efecto para llevarse un balón dividido que el ariete valenciano puso al punto de penalti. Allí, el remate de De Frutos fue tapado por la zaga nazarí. Oportunidad no aprovechada pero una declaración de intenciones en firme que continuó con un disparo desviado desde la frontal de Pablo Martínez.

Todas esas buenas intenciones se fueron al traste acto seguido con el gol de Germán al aprovechar un error garrafal de Vezo en la marca. El central visitante tan sólo tuvo que hacer un simple amago para quedarse totalmente sólo y rematar a placer. La defensa del Levante, una lágrima, otra vez.

Tras el jarro de agua fría, el Levante intentó reaccionar buscando la velocidad de Morales arriba pero se topó con un rocoso Granada. En la otra área, todo lo contrario. La defensa granota era todo un flan y de ello volvió a aprovecharse el rival con un disparo cazado al aire por parte de Milla que obligó a Aitor Fernández a estirarse para mandar a córner.

Las prisas y la precipitación gobernaban a un Levante que naufragaba en sus intentos por empatar el duelo. Tampoco resultó efectivo el disparo cruzado de Soldado desde la frontal en el 22'. Víctor Díaz replicó de forma similar en la siguiente acción.

En el 28', Soldado estuvo cerca de aprovechar un regalo en forma de pase atrás fallido por parte del Granada pero el delantero no llegó por muy poco y lamentó la acción.

Un gol de chiste

El drama absoluto se consumó en el minuto 38' cuando la defensa granota volvió a hacer el ridículo más espantoso. Una acción mal defendida, un rebote descontrolado y una cesión de cabeza por parte de Clerc que se quedó corta y que Luis Suárez aprovechó para firmar el segundo del partido y dejar al Levante en evidencia. (0-2)

El fútbol estuvo cerca de concederle una reválida al Levante, que vio cómo el partido se marchaba al punto de penalti después de que Soldado fuese derribado en boca de gol, sin embargo, Sánchez Martínez fue a revisar al VAR para determinar que todo quedaba invalidado por la posición antirreglamentaria de Soldado en el inicio de la acción.

En la reanudación, Javi Pereira buscó una reacción rápida con la entrada de un triple cambio. Entraron Vukcevic, Campaña y Son por Malsa, Pablo Martínez y Franquesa.

El Levante lo intentaba pero con la misma suerte y precisión que en la primera mitad. Fue Rochina el primero que probó fortuna con un disparo raso que atajó bien Aitor. El Levante contestó con una buena combinación que culminó Bardhi llegando desde atrás pero Maximiano envió a córner.

Con el paso de los minutos, el partido entraba en una dinámica de ida y vuelta. La necesidad espoleaba a un Levante sin puntería. La afición lamentó el error de De Frutos en el 60' cuando envió fuera un balón que ya era cantado como gol.

El Levante estrechaba el cerco cada vez más y el Granada se defendía como podía. En el 65', Bardhi probó fortuna desde lejos pero Maximiano atajó en dos tiempos.

El Granada firma el tercero

Todos los atisbos de reacción cayeron en saco roto con el tercer golpe letal del Granada. Campaña perdió el cuero en el centro del campo y Antonio Puertas recuperó la posesión para montar una contra mortal para el Levante. Tan solo le bastó una bicicleta para sacar de su sitio a Vezo y con un certero disparo batir a un inmóvil Aitor al que tan sólo le quedó claudicar. (0-3)

El respetable del Ciutat comenzó a abandonar las gradas del estadio debido al ridículo de su equipo en un partido del que ya no hubo mucho más que contar.