El Levante UD se marchó del Ciutat de València con un sabor agridulce tras el partido contra el Mirandés de Alessio Lisci. El gol tempranero de Chaira quemó todos los planes de Calleja, pues apenas había transcurrido el primer cuarto de hora de partido. Kocho fue el encargado de empatar el partido con un majestuoso gol de falta directa. La afición rompió en aplausos con el georgiano y el equipo celebró a modo de piña. Después del descanso, Pablo Martínez se echó al equipo a la espalda en busca del objetivo, que es el ascenso a Primera División. El empate no valía o, al menos, eso parecía.
Por ello, Pablo Martínez marcó un auténtico golazo de falta directa que detuvo el portero pero detrás de la línea, como puedes ver en el vídeo en la parte superior de la pantalla. En un principio el gol no había subido al marcador, pero el colegiado terminó por darlo. Finalmente, el Mirandés empató en el descuento con un gol de Marton.