Giorgi Kochorashvili y Carlos Álvarez. Los jugadores con mejor valor estadístico del 1-2 en Gijón. Los goleadores de la primera victoria de la temporada del Levante. La revelación de la revelación de la Eurocopa y el factor diferencial de la recta final granota de la temporada pasada. El Capitán América y Harry Potter. Kocho y Carlitos ejecutaron al Real Sporting en un triunfo de autor. La alegría final, ese abrazo colectivo, fue el mejor reflejo de un vestuario que cree en una nueva identidad que aún tiene aristas por pulir, pero que ya marca el camino.
Lo de la pretemporada, con esas magníficas sensaciones en esos siete amistosos sin derrotas, no fue casualidad y en Orriols ha calado el espíritu solidario y comprometido del ‘método Calero’. Sin duda que la mejor manera para afrontar este sábado el estreno en el Ciutat de València en el reencuentro con Paco López al frente de un Cádiz que empezó con una derrota estrepitosa en casa ante un Real Zaragoza que ha vuelto a echar a andar como un cañón.
Uno de los objetivos que se ha marcado Carlos Álvarez para esta temporada es mejorar sus cifras goleadoras. Dicho y hecho a las primeras de cambio. La temporada hizo tres tantos en 29 encuentros (23 como titular). Y en ese esquema con el que ha arrancado el Levante (4-3-3), el ‘24’ se mueve como pez en el agua entre líneas, reforzado con dos jugadores que brillan por su desgaste e intensidad como Oriol Rey y Kochorashvili. Carlos también es un ejemplo de entrega y solidaridad, pero es más que notorio que plasma sus mejores virtudes cuando imagina y sin estar encorsetado a banda como le sucedía con Calleja y Miñambres. Calero lo ha puesto en su sitio y en Gijón se vio el resultado.
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C. Álvarez: “Hemos sacado una victoria muy valiosa en un campo supercomplicado” pic.twitter.com/7t2fAAe51T
— Levante UD (@LevanteUD) August 18, 2024
Después de un partidazo así, y con el mercado aún por cerrar, es normal que tiemblen un poquito las piernas. Pero la realidad es que Carlos Álvarez es feliz en el Levante y siente que esta segunda temporada va a ser la de su explosión profesional. El ‘Niño Maravilla’ ya se está haciendo mayor y promete emociones fuertes. Su estatus contractual ha variado con esa condición a todos los efectos de jugador con ‘ficha A’, que le ha llevado a pasar del ‘37’ al ‘24’ a la espalda. Tiene contrato hasta 2027 con el Levante y el Sevilla tiene un porcentaje de un 40 por ciento de una hipotética venta.
Orriols puede estar tranquilo. Su felicidad por la victoria así lo refleja. Y es que además Carlos está agradecido por la oportunidad que le dio el Levante para presentarse al mundo futbolístico. Un presente que el Sevilla no le brindó. Con este debut y lo que se vislumbra si las lesiones le acompañan, todas las partes son conscientes de que esta segunda temporada volverá a colocar su nombre esté entre los preferidos para otros clubes.
Julián Calero sabe que tiene una joya y la gestión de su talento es clave para encadenar grandes actuaciones como la de este pasado domingo. "No estaba para más tiempo y, además, viene de una lesión en el cuádriceps. En el descanso se ha puesto hielo y no quería tener sorpresas con él. Hay que entender las cosas que suceden: a partir del 60, en estas fechas, los jugadores entran en un déficit físico. Y ahí es donde se empiezan a lesionar. Su cambio buscaba matar dos pájaros de un tiro: intentar hacer más fuerte el centro del campo y proteger a Carlos", explicaba Calero tras el cambio.
A la espera del desenlace de Pablo Martínez, la medular del Levante tiene argumentos y variantes de sobra para fluir a la perfección. En Gijón se apostó por Oriol Rey, Kochorashvili y Carlos Álvarez… y Calero cambió el guión del partido, ante el empuje rival, y construido un engranaje aún más férreo con Oriol Rey, Algobia, Kocho y la inclusión de Sergio Lozano por fuera, pero para que se asociara por dentro. Un movimiento de entrenador y clave para frenar el ímpetu del Sporting. Y aún falta la inscripción de Iborra.
En esa solidaridad colectiva, Kocho fue un claro ejemplo. Omnipresente y goleador en una de las virtudes de este nuevo Levante: las acciones a balón parado. Con el internacional georgiano, con contrato hasta 2027, habrá incertidumbre hasta el final. Como avanzó la Cadena SER, la Premier League no le ha concedido a Kochorashvili el permiso de trabajo (GBE) al no alcanzar los puntos necesarios, por la normativa británica, para poder jugar en Inglaterra y no se ha podido avanzar en la negociación con un equipo que estaba dispuesto a pagar por su traspaso tras su revalorización en la Eurocopa.