La Real Sociedad, tras un nuevo traspiés en Anoeta, confirma que se halla en su peor momento de la temporada, aunque con el valioso punto logrado ayer ante el Leganés se instala en solitario en la quinta plaza y lidera la lucha por la Liga Europa al entrar en el tramo decisivo de la temporada.El empate a uno en Anoeta ante el conjunto madrileño, decimoséptimo clasificado, ratificó el problema que tienen los donostiarras este año en su campo y, si el estadio realista no aporta puntos en estos últimos partidos de la Liga, el sueño europeo se puede escurrir de las manos en el último momento.
Eusebio Sacristán abogó en su rueda de prensa después del encuentro por pasar página y "no pensar en el pasado", aunque también es cierto que la situación de los blanquiazules es envidiable y que cualquier aficionado habría firmado a principio de temporada por estar en solitario como quintos clasificados a menos de dos meses del final de la competición.
El bajón en Anoeta es, sin embargo, tan evidente como preocupante, porque en 2017 se han llevado los tres puntos del campo donostiarra el Sevilla, el Villarreal y el Athletic de Bilbao y han empatado tanto el Eibar como ayer el Leganés.
El balance del año en San Sebastián no es alentador, pues sólo se han obtenido este año 8 puntos de 21 que se han puesto en juego, algo que Eusebio tendrá que intentar enmendar de forma inmediata.
La Real además no tiene un calendario muy favorable fuera de casa para compensar lo que se deja como anfitrión, ya que rinde visitas en el mes de mayo nada menos que al Atlético de Madrid, al Barça y al Valencia.