La Real Federación Española de Fútbol acaba de anunciar a través de una circular que los conocidos water breaks (un parón para permitir refrescarse a los futbolistas) estarán permitidos en los próximos partidos en caso de "altas temperaturas".
Así, con el objetivo de "minimizar los riesgos" para la salud, la RFEF da un nuevo paso en la modernización y adaptabilidad del fútbol español a los nuevos tiempos.
"En el caso de que la temperatura sea notablemente elevada y ello aconseje la hidratación de los futbolistas, a fin de minimizar los riesgos que produce la práctica del deporte bajo altas temperaturas", explica el texto antes de indiciar que "en tales supuesto, y siempre previo común acuerdo entre clubes y árbitro (...) se producirá una vez por cada tiempo reglamentario y a partir de que se haya cumplido el minuto 25 de cada periodo. La pausa tendrá una duración de dos minutos que serán añadidos al descuento final de cada tiempo".
El comunicado puede ser leído al completo, aquí.