Felipe Miñambres, director deportivo del Celta de Vigo, reconoció hoy, durante su intervención en la junta de accionistas del club, que la salida, en calidad de cedido, del defensa David Costas al filial del Barcelona no estaba prevista por el cuerpo técnico pero la aceptaron porque fue un deseo del futbolista."Tanto la idea del club como del cuerpo técnico era que se quedase en el primer equipo pero él pidió salir cedido porque pensaba que no iba a jugar tanto como quería para no frenar su progresión después de un buen año en el Oviedo", indicó el máximo responsable del área deportiva.
Miñambres recordó que la venta del joven centrocampista Pape Cheikh al Olympique de Lyon fue otra situación "no prevista" por la dirección deportiva pero la "importante" oferta económica del club francés les hizo que reconsideraran su postura.
"Nuestro principal objetivo era mantener el núcleo de jugadores que habían disputado más minutos en la pasada temporada, ceder a los que pensábamos que iban a tener menos oportunidades (Bongonda, Beauvue, Lemos, Borja Fernández y Borja Iglesias) y rescindir a los que pensamos que habían cumplido un ciclo en el Celta (Marcelo Díaz, Madinda, Alex López y Señé)", explicó.
La apuesta por jugadores "de futuro" como Lobotka, Maxi Gómez y Emre Mor o la renovación de Iago Aspas (hasta el 2022) y Hugo Mallo (2021) han supuesto "un esfuerzo" que se vio compensado por la reducción del número de jugadores de la primera plantilla: "Al estar no estar en Europa entendíamos que era lo mejor".