El entrenador del Celta de Vigo, Juan Carlos Unzué, eludió el papel de favorito de su equipo en la eliminatoria de dieciseisavos de final de la Copa del Rey pese al 1-2 que lograron en el campo del Eibar."Está claro que tenemos una ventaja adquirida por méritos propios hace un mes en Eibar, pero las circunstancias son diferentes porque ha pasado mucho tiempo", dijo hoy el técnico en una conferencia de prensa.
Añadió que "el Eibar es un equipo con un estado de ánimo muchísimo mejor. Han vuelto a cambiar el sistema y están cómodos de nuevo con el 4-4-2".
En este sentido, confesó estar seguro de que sus jugadores van a tener un partido "muy exigente" por el estilo de juego del conjunto dirigido por José Luis Mendilibar, por lo que necesitarán "hacer un gol" para alcanzar la siguiente ronda.
Cuestionado por el formato de doble partido de la Copa del Rey, respondió que "cuando se jugó a un partido me gustó mucho aunque también tengo que decir que cuando gané este título fue a doble partido".
No obstante, afirmó que "teniendo un poco de sentido común viendo como está el calendario, creo que por el bien del espectáculo y de los propios jugadores sería mejor jugar a un solo partido".
En ese sentido, Unzué confirmó que los jugadores menos habituales del equipo van a tener su "oportunidad" en el partido previsto para mañana.
"En Eibar respondieron a la confianza que depositamos en ellos y se ganaron la posibilidad de volver a tener su momento. Mañana podría ser un buen partido para repetir", sentenció el preparador celeste, que recupera para este partido al central Roncaglia y al delantero John Guidetti.