Los delanteros del Mallorca se desmelenan y no dan ninguna opción al Autol

El RCD Mallorca ha pasado a la segunda ronda de la Copa del Rey con una contundente victoria sobre el Autol, que no ha podido contrarrestar con su ilusión la potencia de los baleares, ambiciosos y efectivos desde el primer momento con un juego de ataque que les llevó a sentenciar el encuentro en apenas veinte minutos.

El Autol afrontaba un partido histórico y un día de fiesta para casi cuatro mil personas en las gradas de La Planilla y por ello saltó al campo "espoleado" y valiente, como si quisiera mostrar personalidad en los primeros minutos.

Y lo hizo durante cinco minutos, en los que trató de presionar al Mallorca y robarle el balón en el centro del campo, aunque casi siempre para perderlo poco más tarde.

Pero el equipo de Javier Aguirre no se dejó sorprender por ese inicio y pronto dejó claro que respetaba el choque y que, por ello, quería dar su mejor nivel y ofrecer un buen espectáculo con fútbol de ataque por las bandas.

De esa forma desactivó de forma definitiva al Autol, primero cuando envió dos al palo dos balones -por Lago Junior y Abdón-, antes del minuto 10; y justo después del cuarto de hora cuando marcó el primer tanto, en un saque de esquina que remató con el pie Abdón, muy activo todo el primer tiempo.

Además, justo dos minutos después Grenier mandó al fondo de la portería riojana un testarazo tras un centro medido desde la derecha.

El Autol se desfondó y dejó espacio para que el Mallorca se recreara y se fuera al ataque, con continuas acciones por banda que terminaban en peligrosos remates; Ángel, al borde de la media hora, y, e nuevo Abdón, en el minuto 35, aprovecharon otros dos para lograr el 0-4.

Solo entonces el equipo riojano pareció regresar al partido y trató de nuevo de robar el balón en el centro del campo y a dar algo más de trabajo a la defensa mallorquina; en una de sus mejores acciones, poco antes del descanso, Víctor Toé logró conectar un buen pase desde la izquierda que Víctor Merino remató con peligro.

Los riojanos, que no tenían nada que perder, volvieron a salir valientes al campo en el segundo tiempo y consiguieron su acción más peligrosa, un disparo de Palacios, desde fuera del área, que fue al larguero.

El Autol quería tener más la pelota y el Mallorca le dejaba, consciente de que no había ya nada en juego; por ello el equipo riojano tuvo más presencia en el campo de los baleares, pero apenas concretó acciones de peligro.

Además, a medida que avanzaba el tiempo empezó a pagar el esfuerzo y a ceder terreno, algo que el Mallorca no dejó pasar y volvió a tomar el mando para irse más al ataque en la recta final del encuentro.

Con esa inercia, marcó dos buenos goles para cerrar el "set", cumplir los pronósticos con autoridad y pasar a la siguiente ronda de la Copa del Rey.