El delantero del Girona, Taty Castellanos, es el hombre del momento en la LaLiga Santander tras su gran actuación el pasado martes en el Girona-Real Madrid, partido en el que el argentino consiguió marcarle nada menos que cuatro goles al conjunto blanco. Sin duda, una noche inolvidable para el jugador del equipo catalán.
Más aún si al final del encuentro, el que fue su gran enemigo y con quien tuvo "algún encontronazo" durante los noventa minutos le reconoce el partidazo que se había marcado. Y es que el Taty Castellanos confesó que el defensa brasileño del Real Madrid, Èder Militao, le "felicitó" tras el gran partido que se había marcado en Montilivi.
"Fui a saludar a Militao, es un jugador que me gusta mucho. Nos pegamos mucho, tuvimos algún encontronazo, pero siempre con respeto. Me felicitó y le agradecí mucho sus palabras, porque me dijo que había sido un gran partido y que lo disfrute, que siga así", aseguró Castellanos en ESPN.
El delantero se mostró muy contento por lo conseguido ante un rival como el Real Madrid. "Yo vivo el día a día, vivo el presente y lo disfruto mucho. La gente del club, el cuerpo técnico, los compañeros y mi entorno me hacen tener los pies sobre la tierra y eso es importante", destacó 'Taty', quien acumula ya siete goles en esta liga.
También se sintió satisfecho de que el objetivo de la permanencia del Girona un año más en Primera esté prácticamente asegurado. Con el club catalán décimo en liga, a seis puntos de Europa, Castellanos incluso se atrevió a mirar más allá y cree que pueden pelear por un puesto europeo de aquí a lo que resta de temporada.
"Ahora a disfrutar este momento, no se le hacen cuatro goles al Madrid todos los días, y a seguir trabajando porque el lunes tenemos un gran partido. Necesitábamos la victoria, teníamos que ganar para tratar de liberarnos, despegarnos de abajo y ahora como LaLiga está tan apretada, nos da para mirar para Europa", declaró el '9' del Girona.
Sustituido por su entrenador, Míchel Sánchez, en el minuto 72 de partido, Castellanos se quedó con ganas de más para intentar conseguir el repoker (cinco goles): "Un ratito más no vendría mal tampoco". Pese al lamento, el delantero tampoco quiso darle mayor importancia al asunto: "Son las decisiones que toma el técnico, ya había hecho cuatro y el partido estaba lindo para que jugaran los compañeros".