Hace dos meses y medio, la linier Guadalupe Porras fue protagonista involuntaria de una de las imágenes de más lamentable de la temporada. En plena celebración de un gol del Chimy Ávila en el Betis - Athletic de la segunda vuelta de LaLiga. Era el minuto 13 de partido cuando el operador de la steadicam invadió el campo cruzando la línea de banda con la mala fortuna de acabar atropellando a la linier. El impacto fue de tal magnitud que Guadalupe perdió el conocimiento y tuvo que ser trasladada al hospital e intervenida de urgencia para suturar la profunda herida que le provocó el choque en la cara. Al instante, las reacciones no se hicieron esperar y el árbitro de aquel partido, Cuadra Fernández, ya en directo tuvo una gran bronca con el operador de la cámara insistiéndole varias veces en que abandonara su posición junto a la banda.
Pues bien, el colegiado ha vuelto a protagonizar una imagen que demuestra que aprendió bien la lección de su visita al estadio Benito Villamarín. Casi al final del Barça – Real Sociedad y tras marcar Raphinha el penalti del 2-0 el jugador brasileño fue amonestado por quitarse la camiseta. En ese momento, el cámara de la steadicam entra en el terreno de juego y se lleva una buena bronca de Cuadra Fernández que le indica con vehemencia que salga del campo. Hay que señalar que una de las indicaciones que tanto expertos en realización televisiva de partidos como la propia Liga dieron tras el accidente de febrero era que este tipo de operadores tienen que acceder al campo siempre desde la línea de fondo y nunca a través de la línea de banda. Una norma que, en el caso de la secuencia que se vivió en Montjuic, el cámara cumplió a rajatabla.
No obstante, y con el grave antecedente de febrero en el campo del Betis, Cuadra Fernández ha preferido no arriesgar lo más mínimo y exigir al cámara que abandonara el terreno de juego. El operador, por su parte, no ha puesto ningún problema y accedió al requerimiento del colegiado de forma inmediata.
De todo esto, la mejor noticia es que Guadalupe Porras está completamente recuperada del fuerte golpe que recibió en Sevilla al punto de poder arbitrar de nuevo partidos de la talla de un Barça – Real Sociedad. La propia linier relató semanas después de lo sucedido cómo vivió el incidente, asegurando que no recuerda nada de los minutos posteriores al golpe.
El Barça logró hacerse con los tres puntos ante una Real Sociedad que, pese a tener margen, aún podría quedarse fuera de Europa. El jueves recibe al Valencia en un partido clave para asegurar, como mínimo, su presencia en la Conference League.