El Real Madrid golea al Alavés en la fiesta del Bernabéu

El Real Madrid se impuso al Alavés este martes en un partido en el que ninguno de los dos se jugaban ya nada. Fue una noche especial para la afición blanca ya que el cuadro blanco, tras recibir el trofeo de campeón de LALIGA y celebrarlo por las calles con la afición el domingo, ofreció a sus hinchas el título de la competición doméstica en los prolegómenos del partido.

La primera del partido fue un paradón de Courtois a Omorodion para seguir sembrando dudas a Carlo Ancelotti para la final de Wembley. En un saque de esquina largo del Alavés, el futbolista babazorro remató y el meta la sacó ya prácticamente en el suelo.

Una reacción que combatió poco después Vini, en una contra con un buen control de tacón, pero que se le fue largo y terminó marchándose por línea de fondo. Y poco después, el gol de Bellingham.

En el 10', el inglés aprovechó un buen centro de Kroos para dejar sin opciones a toda la defensa y rematar de volea sin apenas ángulo para batir la portería de Owono.

En el 19', Vinicius tuvo una buena ocasión desde la banda izquierda, en la que recortó y buscó el primer palo, pero se fue a la red. Otra más un poco más tarde que la tapó Abqar y que provocó que el Bernabéu estallara en cánticos de "Vinicius, Balón de Oro".

El brasileño no bajó la marcha y en el 27' llegó su gol. Belligham metió un gran pase entre líneas para Camavinga, que dejó un buen pase atrás para que Vini solo tuviera que empujarla.

Ya en el 46', otro gol. Un señor golazo de Fede Valverde, con un latigazo que coló por la escuadra y poco pudo hacer el meta babazorro.

Tras el paso por vestuarios el ritmo bajo de intensidad, pero las carreras de Vini volvieron a reactivar a todo el equipo. En el 57', un nuevo paradón de Courtois de mano abajo en el disparo de Hagi y un minutos después, una gran intervención de Owono en el disparo de Rodrygo.

Pasaron los minutos y también llegaron los cambios. También otro gol de Vini. En el 70', el brasileño con pilas aún más que suficientes aprovechó una buena combinación entre Fede Valverde, Güler y Bellingham para marcar un golazo por la escuadra larga.

También tenía pilas y ganas de reivindicarse Güler. Rodrygo buscó el gol, pero el remate le llegó al turco, que lo aprovechó para colocarla rasa rozando el palo. Y sin tiempo para poco más fue muriendo un partido que terminó con goleada blanca y en una auténtica fiesta para la afición.