El exentrenador del Córdoba Juan Merino, destituido este lunes tras siete jornadas en el cargo, se ha despedido este martes del cordobesismo y ha afirmado que su corazón "siempre estará en deuda" con el sentimiento de la afición hacia su equipo, y que "es tiempo de remar juntos".Merino afirmó en un comunicado que la afición es "el principal activo y valor que tiene el club", se mostró "agradecido por su gran calidad, respeto y comprensión", y aseguró que sin su ayuda "difícilmente habría esperanza de llegar a buen puerto", por lo que apostó por estar unidos en un camino "que será duro pero seguro que con un final feliz".
El técnico gaditano dio las "gracias" a los jugadores y dijo que durante su periplo en Córdoba ha intentado imprimir en el equipo con parte de su filosofía, "transmitiendo los valores de respeto, diálogo, compromiso y esfuerzo" que ha adquirido "a lo largo de estos años vinculados al mundo del fútbol".
También hizo extensivo su agradecimientos a la dirección del club y a todos sus trabajadores "por su profesionalidad y su excelente trato", y añadió que "con su dedicación, constancia y trabajo, el club seguirá creciendo para intentar conseguir sus objetivos".
Merino añadió que "el fútbol es caprichoso", pero se mostró "seguro que la constancia y el esfuerzo traerán la recompensa esperada", concluyó.
Juan Merino fichó por el Córdoba a mediados de octubre hasta el final de temporada y otra más y ha sido sustituido de forma interina por Jorge Romero, hasta ahora entrenador del filial del Córdoba.