El Real Zaragoza consiguió volver a la senda del triunfo en un campo tan difícil como el del Andorra. De allí salió victorioso con un buen gol de Mollejo y acompañado por su fiel afición. Eder Sarabia no supo contrarrestar la expulsión de Bover y el juego blanquillo, pese a que aseguraba tener claro cómo meterle mano al rival los días previos al choque.
Sarabia tenía claro el plan, pero le falló el tiro. Ese podría ser el resumen de lo que sucedió en Andorra. En la previa del encuentro de este jueves, el técnico rival aseguraba saber cómo ganar al Zaragoza. Lo dijo con rotundidad, pero finalmente no sucedió así.
Estábamos en La Romareda viendo el partido, y lo tenía todo clarísimo, solo quiero transmitirle este plan a los jugadores, lo que tienen que hacer y que tengan esa ambición. A ver si soy capaz de transmitírsela para competir ante un muy buen equipo, pero al que podemos hacerle daño y ganarle", fueron las palabras del míster antes del choque.
Finalmente no fue así. El Zaragoza fue capaz de superar por la mínima al Andorra y, pese a la derrota, el míster local se mostró muy satisfecho con lo que vio de los suyos, obviando en todo momento el analizar el juego del conjunto zaragocista. No quiso entrar a valorarlo. Por suerte, los tres puntos van a casa.