Málaga C.F. | 01 | 0 | Real Sporting Club de Gijón |
1-0, minuto 49. Rondón, de cabeza.
El Málaga empezó queriendo y sabiendo que podía. Artificios y pragmatismo mezclados con un punto de imprecisión fruto de la ansiedad lógica. La Champions en juego, no hay que olvidarlo. Avisó Cazorla en una falta y un disparo de lejos, Isco comenzó a hacer de las suyas desencorsetado de la izquierda. Rondón reclamó un penalti y Eliseu avisó de lejos, especialidad de la casa. Tenía que llegar. Pero se resistió toda la primera mitad.
Insistió el Málaga, con toda la fe que pudo. Rondón cabeceó magníficamente un balón que se fue al poste, luego llegó Juan Pablo para prolongar el sufrimiento malaguista. Embotelló el Málaga al Sporting y tuvo una doble ocasión de Isco y Demichelis. Luego repitió el argentino, en plan Beckenbauer, como más le gusta. Y cerró la primera mitad Cazorla con un disparo desde la frontal del área con la zurda. Con La Rosaleda aguantando el aire, emergió Juan Pablo de nuevo, que metió la mano para mandar a córner las ilusiones malaguistas. Mientras tanto, noticias desde el transistor. El Levante se adelantaba y el Mallorca caía claramente en el Bernabéu. El empate en El Madrigal iba sosteniendo el invento a falta del gol malaguista.
El Málaga comenzó con más brío aún la segunda mitad. Joaquín se puso el traje de luces. Pero Juan Pablo abortó su gol primero y más tarde un obús de Camacho. Pero el gol tenía que llegar. Y llegó, cómo no. Salomón Rondón se quitó una tonelada de esa de presión que se autoimpone marcando un tanto exquisito de cabeza, de nueve puro. El centro, por cierto, del incombustible Cazorla.
La Rosaleda estaba de fiesta, pero el Málaga no terminaba de rematar la faena. Acumuló ocasiones sin lograr materializar ninguna. Rondón acabó dando patadas al poste de Fondo por su mala precisión, aunque se retiró ovacionado como un héroe. Entró 'Van Gol' y también se topó con Juan Pablo. Entre medias, Monreal también falló con el estoque.
Pero había que animar un poco la fiesta al modo arbitral para que fuese un partido del Málaga como Dios manda. Delgado Ferreiro mostró la segunda amarilla a Isco, al que habían cosido a patadas durante el encuentro. A la par, Falcao adelantaba al Atleti en Villarreal... ¡Qué sufrimiento!
Con ese picante final, el partido moría a la vez que nacía el mejor Málaga de la historia, un Málaga de Champions. Los Al-Thani siempre cumplen sus promesas. Nadie se mueve de sus butacas. El jeque bajó al césped y se dio un comedido baño de masas, saludando al respetable. Se espera al equipo que aparezca de nuevo en escena... La fiesta no ha hecho más que comenzar.