Miguel Ramos Vargas ‘Migueli’ es leyenda del malaguismo. 463 partidos como blanquiazul a sus espaldas, 13 temporadas, su internacionalidad española… Toda una historia de amor. Una vida.
“El mejor jugador de la historia del club”, relataba entre lágrimas emocionadas el consejero Antonio Benítez. Porque el acto ha sido “emotivo” y “bonito”, según confesó Miguel Ramos, hijo de Migueli y que guarda un gran parecido con su padre, fallecido en 2002 a las 60 años, víctima de un cáncer.
No ha faltado nadie a la cita. Muchas caras conocidas han visto como los nietos de Migueli corrían la cortina que guardaba el frontal de su nueva puerta, con una de sus fotos más características, escudo del Málaga en el pecho y semblante serio y concentrado. No se han querido perder la ocasión los futbolistas Isco, que junto a Migueli es el único jugador malagueño y malaguista en jugar en la selección, y Jesús Gámez. “Si se le recuerda así es porque lo hizo bien y ha sido muy querido. Ojalá yo algún día pueda tener una puerta. Ya llevo ocho años en el primer equipo y no sé cuantos en la cantera”, deslizó el lateral fuengiroleño.
La familia de Migueli estuvo arropada por numerosos miembros del club, como los consejeros Martín Aguilar, Ben Barek y Benítez o el director deportivo Mario Husillos; así como por los ex jugadores del Málaga Añón, Merino, Ernesto, Monreal o Fernando Peralta; el concejal de Deporte, Damián Caneda; el periodista Juan Cortés, autor del texto que se incluye en la leyenda de bocana de su puerta y que se titula ‘La mejor joya de la cantera malaguista’; o el presidente de la Federación de Peñas, Miguel Molina, entre otros muchos conocidos, amigos y medios de comunicación. En total, unas cien personas asistieron al acto que tuvo su continuidad, ya de una forma más íntima, en el interior de La Rosaleda.
La puerta 5, la de Viberti, será la siguiente en estrenarse. Será, concretamente, el miércoles 13 de marzo, poco antes del comienzo del Málaga-Oporto de la vuelta de los octavos de final de la Champions.