Afortunadamente para el jugador, todo ha quedado en la contusión y espera evolucionar favorablemente a lo largo de la semana, incluso podría volver a ejercitarse mañana. La lesión se produjo en un lance del partido contra el Atlético de Madrid, tras un pisotón fortuito de Óliver.
Gámez recibió tratamiento terapéutico y estuvo en el gimnasio mientras el grueso del grupo trabajó sobre el césped del Ciudad de Málaga. Por otro lado, Casado estuvo de nuevo con el equipo ejercitándose al nivel del resto, aunque parece un poco precipitado que pueda estrenarse ante el Levante.