El Málaga conquistó el Camp Nou con un tanto atípico, que bien podría parecer improvisado y de cualquier recreo de niños, pero que escondía detrás mucho trabajo previo. Kameni sacó rápido con los pies, Dani Alves se confió y Juanmi le echó la fe que atesora para marcar el único tanto del partido.
En dos toques el Málaga besó las mallas culés. El portero camerunés tenía esa consigna de sacar pronto para aprovechar las contras y la velocidad de los hombres de arriba, y la del tanto no fue la única. El Málaga no permitió al Barcelona correr y sí lo hizo cuando tuvo la oportunidad, llegando en superioridad al balcón del área de Claudio Bravo. Insólito. Estaba todo más que estudiado. Y así llegó el gol que dio los tres puntos y una alegría histórica.
Incluido el gol, en el que la pillería, la confianza y la capacidad de Juanmi le valieron para convertirse en el rey de la tarde. Con este gol, Juanmi suma cinco dianas y se convierte en el pichichi del equipo esta temporada Es su tanto número quince con la camiseta blanquiazul en 70 partidos. Va camino de récord a sus 21 años.