Camacho: "En caso de una salida será buena para todo el mundo"
Ignacio Camacho fue el protagonista del programa Área Malaguista. El centrocampista maño estuvo muy simpático y mostró su lado más cercano. Pero también habló claramente su futuro. Primero en tono de broma: "“Ya me estáis echando… Yo llevo aquí cuatro años y medio de los cuales creo que tres y medio llevan diciéndome: “Ah, este año te vas”. Y jolín, yo sigo aquí. ¿Me tenéis manía, me queréis echar?”.
Pero Camacho, bromas aparte, aseguró ante las cámaras de 101 Televisión que lo que pase será bueno para el Málaga: “A ver, siempre al final es parte del fútbol lo que se hable fuera de vestuarios o en la prensa, pero yo estoy muy tranquilo. Tengo que vivir el presente, lo que venga, vendrá y será bueno para todo el mundo en el caso de que sea una salida. Lo que es pienso es a día de hoy dar lo máximo de mí, como he hecho hasta ahora. Yo tengo un contrato de cuatro años con el Málaga. La realidad es la que hay en la mesa, lo que hay firmado, para qué pensar en el futuro. Cada verano se repite lo mismo o se habla. Otra cosa es que haya venido realmente algo”.
Admitió la oferta del Napolés, desestimada por el club con su beneplácito: “Sí (respondió afirmativamente a la existencia oferta napolitana), pero es lo que digo, el club decidió que no era el momento para vender. Yo estaba de acuerdo, no puse ninguna pega. Siempre he dicho que en el momento que salga del club, no quiero salir a malas. Pienso que en el club me han demostrado mucho y yo a ellos también. Hay un respeto mutuo y si tengo que salir será todo fácil”.
Así que su realidad está en Málaga hasta que se diga lo contrario. Y lleva muchos meses forzando para seguir aportando cosas al equipo. Una pubalgia que le merma: “Intento jugar todos los domingos porque es lo que quiero. Es verdad que a lo largo de la temporada vas sufriendo bajones físicos. En este caso por mi lesión, pero bueno, entre todos intentamos que esté mejor para el partido y poder dar el cien por cien”. Y por la cabeza de Camacho no entra frenar: “De momento no. El único en que me paré fue cuando volví de vacaciones en Navidad y se lo dije al entrenador: “Mira, no puedo entrenar, no puedo moverme, quiero parar”. Hasta ese momento he estado aguantando dolores, pero mientras vea que puedo, yo quiero seguir jugando. Ver que puedo jugar y parar, pues a mí me cuesta mucho”.
En el programa también hubo hueco para el humor y Camacho respondió con nota haciendo un pleno en el Pasapalabra Malaguista, salió bien de 'encerronas' de Jesús Gámez y Miguel Torres. También se emocionó con las llamadas de Julio Baptista y Francisco Portillo. Aunque uno de los mejores momentos fue cuando contó la 'maldición' que le persigue por su parecido con Pablo Alborán.
Un programa que no tuvo desperdicio y que puedes ver pinchando aquí.