Con el avance de la temporada el Málaga se ha confirmado como un equipo dificilísimo de batir en casa y bastante más vulnerable fuera. Sólo ha conseguido un triunfo lejos de La Rosaleda en lo que va de 2015, el del Camp Nou. Obviando aquella gloriosa tarde, hay que remontarse a diciembre de 2014 para encontrar una victoria a domicilio.
La impresión por los últimos resultados es que el Málaga es mal equipo fuera de casa. Aunque los números dicen otra cosa: a falta de que acabe la jornada, es el séptimo equipo con más puntos a domicilio, con 17 puntos tras cinco victorias, dos empates y siete derrotas.
Las cinco victorias, salvo la de Barcelona, se lograron el año pasado. Concretamente en Córdoba, Real Sociedad, Coruña y Elche. Una asignatura pendiente a corregir de aquí a final de temporada.