Egor Filipenko, central bielorruso del Málaga, ha ganado protagonismo entre el partido copero en Miranda de Ebro y el liguero en el Nuevo San Mamés. En una entrevista publicada por el club, el defensa afirma que necesita al menos "diez partidos" para mostrar sus cualidades. "Me encuentro muy bien, después de haber jugado ya sientes que estás más en el equipo y el ánimo es mucho mejor. Tengo la experiencia de jugar muchos partidos en BATE. Aquí he jugado sólo un partido y medio. Si juego diez partidos ya hablaremos más", señala Filipenko.
Sus inicios fueron complejos. El desconocimiento del idioma fue un lastre, pero va mejorando. "Mi estancia aquí en el inicio fue difícil, no entendía nada, y tuve problemas con esto. Ahora estoy mucho mejor, entiendo más, pero aún me cuesta hablar. Ahora ya entiendo las órdenes que me da el entrenador y yo también puedo preguntar si me hace falta algo", afirma Filipenko, que se apoya en el croata Duje Cop: "Con él hablo más que con otros jugadores".
Bielorrusia está pendiente del ex del BATE Borisov: "Cuando entré aquí había mucho movimiento, luego estuve más tranquilo y ahora que he jugado dos partidos se nota que la gente se acuerda de mí. Por ejemplo, cuando han aparecido notas en las redes sociales de Bielorrusia de que otra vez iba a jugar, había ilusión entre la gente por verme jugar. Para cualquier jugador, jugar por tu país es un orgullo".
También Filipenko considera que debe mejorar. "Es muy agradable cuando la gente habla bien de ti, pero entiendo que necesito ser más duro con mis entrenamientos porque he entrado en un campeonato muy fuerte en Europa", afirma el defensa.
"No hemos empezado bien, pero si analizamos los partidos vemos que hemos jugado bien aunque la suerte no haya estado de nuestro lado. Lo único que puedo decir es que tenemos que ganar sí o sí al Rayo, y el entrenador nos va a mostrar cómo conseguirlo", apunta Filipenko, que de paso echa un capote a Javi Gracia.