Darío Silva y Marcelo Romero han sido dos de los máximos exponentes uruguayos en el Málaga. Compartieron vestuario, vida y colores durante algún tiempo dorado en Martiricos y forjaron una amistad que se mantiene viva gracias al gen charrúa. El Gato tiene ahora ante sí el reto de coger al Málaga, y su amigo lo bendice. “Puede ser el salto que él estaba necesitando, son pocas las oportunidades que se tienen en esta vida y este puede ser un barco muy importante para él. Y debe cogerlo”, señaló Darío Silva en el programa ‘La Jugada Málaga’ de Canal Sur Radio.
Darío se mostró “contento de que uno de mis compañeros en el Málaga va a tener una oportunidad”, a la vez que confesó que “no nos ha sorprendido, siempre ha estado dentro de la entidad, y me da una felicidad enorme, hay que apoyarlo”. El Gato tiene carácter, sí, pero el exdelantero reflexiona sobre ello: “Peiró no tenía carácter ninguno e hizo muchas cosas. Debe haber un poco de suerte y conocimiento futbolístico. Muchas veces se la echa la culpa al técnico y son los propios jugadores”.
Eso sí, para Darío Silva “lo primordial es el tema de la unión y él lo tiene bastante claro, debe tenerlo a todos unidos. Hay pocas horas juntos y la convivencia entre todos es muy importante. Nosotros hacíamos asado porque el grupo no estaba unido, así estábamos más horas compartiendo cosas importantes y ahí se fortaleció el grupo”.
Por último, Darío Silva, que se encuentra en Uruguay, donde trabaja para René Ramos, confesó que regresa a Málaga en verano para quedarse. “Me gustaría entrar al club, claro, pero ahora tengo otras prioridades”, dijo, para finalizar, como siempre con su picaresca habitual: “Ya volveré en verano porque aparte ahí hace ahora frío, y a ver si veo más tangas en la playa (risas)”.