Quien coincidió con él en el vestuario del Málaga guarda un grato recuerdo de él. De hecho, dirigía las sesiones y ejercía de mano derecha de Bernd Schuster en la etapa del alemán en Martiricos. Se trata de Fabio Celestini, ex jugador del Getafe, donde trabajó a las órdenes de Schuster y trabó amistad con él. Desde su paso por el banquillo del Málaga comenzó una carrera en solitario que, a tenor de lo visto, no le va nada mal.
Celestini fue elegido en una gala celebrada ayer como mejor técnico de Suiza. Allí ejerce, en su país natal. Después del Málaga firmó como entrenador del Terracina, de la Serie D italiana. En marzo de 2015, Celestini reemplazó a Marco Simone, histórico ex jugador del Milan, al frente del Lausanne-Sport, que estaba en la zona baja de la Challenge League, la segunda división de Suiza. Dos meses después firmó un contrato por tres temporadas. La siguiente campaña (2015/16) Celestini ascendió como campéon de la categoría a la Super League, en la que ahora marcha séptimo. Y se ha hecho acreedor del premio, por delante de Urs Fischer (Bâle) y Adi Hütter (Young Boys).