Ha sido el Málaga desde que luce las siglas de Club de Fútbol un equipo con cierta estabilidad para los técnicos. Salvo situaciones insostenibles en lo deportivo o lo institucional, no ha sido muy de cambios. Tampoco desde que la propiedad es de Al-Thani. El Gato es el segundo técnico que destituye desde 2010. Coincide que este curso tendrá tres técnicos distintos, como en aquella temporada en la que se estrenaba como presidente.
Aunque lo que ocurrió en la temporada 2010-11 para que hubiese tres entrenadores distintos fue una cuestión de interinidad. Rafa Gil dirigió al Málaga en el campo del Espanyol en un partido que Manuel Pellegrini vio desde las gradas de Cornellà antes de debutar como técnico malaguista y recoger el testigo del desastroso Jesualdo Ferreira.
Hay un precedente mucho más exagerado de baile de entrenadores en el Málaga, pero hay que regresar a Segunda División B, a la campaña 1996-97. Empezó el curso Pepe Cayuela, que duró 13 partidos. Juan Carlos Añón, que era jugador, estuvo un partido hasta que tomó el relevo José Manuel Díaz Novoa. El asturiano duró 21 encuentros hasta su despido. El curso lo cerró Ricardo Albis, que se mantuvo tres partidos en el banquillo.
En este caso Juande Ramos se fue por su propio pie y el Gato Romero llegó por decisión del jeque, que este martes le despidió para poner a Míchel al frente.