Los rivales directos siguen dando vida. Pero aunque sea de uno en uno, de vez en cuando van sumando. El Levante ha empatado en casa con el Espanyol y aumenta la diferencia con respecto al Málaga hasta los ocho puntos. Se puede considerar buena esa cifra en clave malaguista, ya que los granotas han ido ganando durante casi toda la segunda mitad y, como les sucedió el jueves en Vitoria, han encajado un gol en el descuento que les deja sin un triunfo que habría colocado la permanencia a diez puntos.
El Deportivo empató este sábado ante el Éibar y el Levante ha repetido resultado ante el Espanyol. Los rivales del Málaga no ganan y apenas suman. Pero los blanquiazules sólo son capaces de arrastrar el escudo blanquiazul y acumular derrotas y más derrotas. Aun así, la distancia podría aumentar hasta la decena de puntos si Las Palmas se impone este lunes en Vigo al Celta.
En cualquier caso, da la sensación de que es indiferente cuál sea la renta con la zona de salvación porque el equipo de José González es incapaz de ganarle a nadie. Aun así, la brecha con la permanencia sigue siendo inferior a tres partidos. Y eso que el Málaga sólo ha sumado 13 puntos en 27 jornadas.
En las últimas dos jornadas el Levante se ha dejado tres puntos en los minutos de descuento, resultados que aún conceden algo de esperanza a los malaguistas más optimistas, si es que aún quedan algunos.