Ontiveros puso La Rosaleda boca abajo en los últimos instantes de la primera parte. Una obra de arte del marbellí, que era el segundo gol del Málaga al borde del descanso. En el túnel de vestuarios estaban esperando los lesionados de la plantilla. Ahí se encontraba, entre muchos jugadores, Dani Pacheco, que fue el primero en abrazar al '17' blanquiazul y abrazarle dándole ánimos y la enhorabuena por el portentoso disparo. Hay buen 'feeling' entre los dos malagueños, y el de Pizarra volvió a demostrarlo, dándole ánimos al nombre propio del triunfo. No fue el único que se cruzó por su camino del vestuario al descenso, como puede apreciarse en el vídeo inferior.
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— Málaga CF (@MalagaCF) 13 de mayo de 2019