Se para uno a mirar la clasificación de LaLiga SmartBank y los puestos 16,18 y 19, tres de los siete últimos, los ocupan respectivamente el Málaga CF, el Dépor y Las Palmas. Es cuanto menos llamativo que los tres equipos que descendieron a Segunda en la 2017/18 y los que el curso pasado contaron con presupuestos y límites salariales más altos atraviesen una situación así y compartan penurias en este arranque de temporada.
Tres históricos del fútbol español que están en horas bajas en todos los sentidos, no sólo en lo deportivo. No ha sido un verano fácil para ninguno. Sus potentes estructuras han dificultado la planificación. El ejemplo más claro es el del Málaga, que no pudo inscribir a sus dos primeros fichajes y después vio como uno de ellos, José Rodríguez, se quedó sin ficha al igual que Iván Rodríguez y Mula, al margen de que sólo se hayan registrado 17 profesionales hasta el momento. Sin ser tan extrema, Las Palmas vivió una situación parecida. Dos importantes ventas casi sobre la bocina allanaron el camino en gran medida a los canarios. No tuvo tantos problemas aparentes el Dépor durante el verano, pero la planificación también ha estado condicionada por las restricciones de LaLiga.
El verde a veces puede distar mucho de lo que ocurra en los despachos, pero esta vez no está siendo así. Málaga, Dépor y Las Palmas no han arrancado nada bien la temporada. Los blanquiazules son decimosextos con 5 puntos (una victoria y dos empates), los gallegos son decimoctavos con 4 unidades (una victoria y un empate) y los amarillos están en descenso, decimonovenos con 3 puntos (tres empates).
En las tres ciudades hay cierta desazón con sus equipos, como es lógico. Sus aficiones han pasado en un año y medio de ver a su equipo en la máxima categoría a hacerlo en Segunda. La campaña pasada Málaga y Dépor pelearon por el ascenso, pero Las Palmas ni eso. Y en el presente curso los tres 'viejos ricos' ocupan la parte baja de la tabla de LaLiga SmartBank y están despertando muchas dudas.
Es la realidad económica del fútbol...pero también es la falta de acierto en la elección de jugadores y entrenadores no todos los futbolistas miran solo el dinero ..casos como Mallorca o Granada son claros aciertos de sus responsables deportivos . cuando hay fracaso deportivo ,como ahora los 3, es mas fácil recurrir al limite salarial como excusa.