El Málaga CF sufrió hasta más allá del minuto 97 para abrochar una buena e importante victoria ante el Real Oviedo, al que doblegó por 2-1 con goles de Antoñín y Adrián de penalti. Cuando más controlado tenía el choque el cuadro de Víctor, que fue expulsado en el tramo final, Ibra puso el único tanto del conjunto asturiano después de un error de Munir, que no atrapó un balón llovido y lo dejó en las barbas del delantero, que regresaba tras una lesión. Ibra metió el tacón y batió a Munir para dar picante al choque (vídeo superior).
Finalmente, el Málaga logró los tres puntos y, nada más finalizar el encuentro, los jugadores blanquiazules se apiñaron en torno a Munir en un precioso gesto que fue correspondido por los aplausos de la afición. Quizá a más de uno se le vino la imagen a la cabeza del fallo del arquero marroquí en el pasado play off, ante el Deportivo, aunque también Munir ha sido clave en muchos partidos con paradas que han dado puntos al Málaga. Cabe recordar que en aquella ocasión fue el público el que logró que Munir regresara al terreno de juego junto al resto de sus compañeros, que se despidieron de su gente tras no lograr el objetivo. En Riazor, hace sólo una semana, el equipo también se abrazó al unísono después del segundo tanto del encuentro, obra de Sadiku.
En esta ocasión, el error de Munir no pasó a mayores. Quedó el triunfo, el segundo consecutivo y el primero en La Rosaleda en la presente temporada. Con susto para Munir, que en la acción del tanto dejó caer el esférico cuando tenía los pies sobre la línea de gol. Al soltarlo, Ibra fue más listo y elevó el 2-1 al tanteador. Como colofón, se palpó el compañerismo y el buen ambiente en el vestuario con una piña que define que en este equipo van todos a una. Unión, por encima de todo. En las buenas y también en las malas.
Después del partido, Víctor Sánchez del Amo fue cuestionado sobre lo que ocurrió sobre el verde con Munir: "Es algo que habla del nivel humano de este grupo y nosotros creemos mucho que el trabajo para fomentar esas relaciones personales aportan capacidad competitiva. Trabajamos para que eso exista y se fomente. Eso aumenta la confianza individual, tienes unos compañeros que te arropan, y la colectiva. Cuando todos creen en eso se va hacia adelante".