La teoría del vaso medio lleno o medio vacío

Insípido empate del Málaga CF en Almendralejo ante el Extremadura. Eso no quiere decir que no sea un punto positivo, a la larga se verá y gran medida dependerá de lo que pueda hacer el conjunto blanquiazul la próxima jornada, última del año, en La Rosaleda ante el Lugo. Este domingo, los de Víctor sumaron un punto ante un rival muy necesitado en un partido que acabó con el mal sabor de boca de la lesión de Luis Hernández, que se retiró en camilla con síntomas que no invitan al optimismo.

Salía Víctor Sánchez del Amo con un único cambio en el once, y era obligado por la lesión de Dani Pacheco. Fue Benkhemassa el que entró por el pizarreño, y el argelino partió escorado a la banda derecha, con Adrián junto a Keidi en el centro y Antoñín arriba con Sadiku. El resto, los mismos que vencieron al Tenerife en La Rosaleda. Se jugaba la vida el equipo local, que empezó con mucha intensidad, yendo fuerte a todos los duelos y tratando de crear peligro a balón parado.

Pasó muy poco durante la primera media hora. El Extremadura buscaba con más ahínco la portería malaguista, pero sin llegar a crear ocasiones claras. El Málaga, demasiado plano y poco ambicioso, limitándose a estar bien ordenado y frenar a los azulgranas. Soporífero primer tiempo entre dos equipos faltos de ideas y de calidad en los metros finales que se citaron tras el descanso para intentar meterse mano mutuamente.

Renato activó al Málaga

No lució Benkhemassa por el costado derecho y Víctor intentó tener más profundidad por esa banda tras el paso por los vestuarios dando entrada a Renato Santos, que ocupó el lugar del argelino. El portugués puso un par de buenos balones desde la cal, sin llegar a ser situaciones de gol, pero que sí metieron el miedo en el cuerpo a un Extremadura que fue de más a menos. También entró Juanpi, cuya primera aparición fue un córner que Sadiku de tijereta remató muy alto.

Había dado un paso adelante el Málaga en busca de los tres puntos, pero la más clara fue para los de Mosquera en el minuto 71. De hecho, llegó a marcar de cabeza Nono tras un centro de Kike Márquez, pero Varón Aceitón no dio validez al tanto porque el atacante cometió falta en el salto sobre Cifu. Aplacó a los blanquiazules ese susto y fue el Extremadura quien puso algo más de brío en el tramo final del encuentro. Acercamientos varios pero estériles por ambas partes y un punto para cada uno en un partido insípido que acabó con el mal sabor de boca de la lesión de Luis Hernández, que se tuvo que retirar en camilla tras recibir un pisotón en la rodilla en un lance con Kike Márquez. Sus gestos de dolor no invitan al optimismo, sino más bien lo contrario...