De un lado para otro hasta compartir vestuario con Kieszek: ¿Qué es de Lucas Piazon?

Lucas Piazon es una de esas promesas, uno de esos futbolistas de gran proyección, que pasó por el Málaga CF en la última década. El brasileño llegó en la época dorada y se marchó pocos meses después con dos partidos de Champions League en sus piernas. Después siguió encadenando un rosario de cesiones con el Chelsea, donde nunca tuvo continuidad ni (casi) oportunidades, que le llevaron al Río Ave. En Portugal, a sus 26 años, ha encontrado la estabilidad y el lugar para volver a sacar su mejor fútbol. Compañero de vestuario del ex malaguista Kieszek, el jugador quiere asentarse en Oporto, tiene contrato hasta 2021, para buscar esa versión diferencial que apuntaba.

Desde que saliera de La Rosaleda no encontró la estabilidad, los datos hablan por sí solos. Seis equipos desde entonces y cinco países diferentes. De un lado para otro buscando pulir ese talento, que indudablemente atesoraba y que le hacía ser internacional sub 17, sub 20 y sub 23 con la 'Canarinha'. En el Vitesse holandés y en el Fulham inglés es donde más lucieron sus números, donde notó la confianza. Por encima de las dos cifras en goles y rozándolas en asistencias. Un verdadero impacto. Tras otra aventura gris en el Chievo Verona italiano llegó el conjunto luso a su carrera. Está siendo importante, ya ha visto puerta también, y lo ve como un lugar para echar raíces, algo poco común para él.

"El ambiente es realmente bueno, con una gran energía. Mi adaptación al estilo de juego fue fácil. Me gusta el estilo de juego del equipo y no tuve ningún problema. Tenía la expectativa de encontrar un club organizado y eso fue exactamente lo que sucedió. Tengo otro año en mi contrato y quiero completarlo", explicaba el protagonista en una entrevista, que tiene vínculo con el Chelsea hasta 2022, aunque él mira más lejos: "Sao Paulo fue mi club de la infancia, fue genial estar allí durante tres años durante mis años como jugador juvenil. Echo de menos ese tiempo y espero volver. No tengo la intención de terminar mi carrera en Europa. Si tuviera la opción de regresar y terminar mi carrera en Brasil, lo aceptaría, mejor aún si tuviera que hacerlo en Sao Paulo".

15 partidos y más de 500 minutos

Lucas Piazon fue la solución de Mario Armando Husillos para paliar la salida de Juanmi en enero de 2013. El brasileño contó con la confianza de Manuel Pellegrini y en esos meses disputó 15 partidos, yéndose a más de 500 minutos. Venía del Chelsea, con la mochila de ser el nuevo Kaká, y pese a ello dio profundidad de armario. En la eliminatoria de octavos de final de la Champions contra el Oporto tuvo minutos en ambos partidos. Luego se terminó el préstamo y le tocó ir de un lado para otro. De momento, en el Río Ave pudo frenar sus pies.