Una de las grandes losas del Málaga es su pobre capacidad para darle la vuelta a resultados adversos. Cuando encaja un gol, le cuesta mucho igualarlo y más si cabe convertirlo en victoria. En la desesperante derrota en Andorra, que dejó muy tocada a la afición, no se generó ningún acercamiento al área rival después de recibir el definitivo 1-0.
El Málaga lleva casi 500 días sin remontar un partido en LaLiga Smartbank. La última vez fue el 4 de noviembre de 2021, en una jornada intersemanal que se jugó en jueves y con una Rosaleda de poca afluencia de público, por la fecha y hora y por el rival. Los goles de Roberto y Paulino, ambos a centros quirúrgicos de Antoñín, sirvieron para el definitivo 2-1. Tras el gol de Sangalli en el minuto 7, se logró revertir en apenas 20 minutos.
Desde aquello han pasado exactamente 489 días. Un largo año y medio sin ver al Málaga remontar un partido, una circunstancia totalmente extraña en los últimos años para el club de Martiricos. De hecho, la racha de partidos consecutivos sin ganar habiendo estado por debajo en el marcador era mucho más larga antes del día de la Real 'B': ¡¡634 días!!
Es decir, los dos últimos partidos que ha remontado el Málaga son el 2-1 ante la Real Sociedad, equipo que entrenaba entonces Xabi Alonso, el 11 de noviembre de 2021; y el Málaga 2-1 Numancia del pasado 9 de febrero de 2020. En aquel duelo en La Rosaleda, el Málaga dejó en nada el gol de Escassi -entonces jugador clave del Numancia- con los tantos de Sadiku y Adrián (90'). Desde febrero de 2020 a la actualidad, han pasado 1.123 días en los que solo se han visto dos remontadas.
Esta temporada, ni con Guede, ni con Mel ni, de momento, con Pellicer se ha conseguido una reacción que se tradujera en tres puntos. Un fiel reflejo de los años complicados que vive la afición, huérfana de una dinámica positiva.