La realidad del Málaga está más que asumida tanto por el propio club como por sus aficionados. En Ponferrada, el equipo que dirige Sergio Pellicer acabó con pie y medio en la Primera Federación. El milagro ya es prácticamente una quimera. Sin dejar de luchar en estas últimas tres jornadas, la entidad de Martiricos ya trabaja a destajo con una gran y obligada revolución en mente.
El técnico blanquiazul apeló a la profesionalidad de cara a este tramo final de campaña. Pese a que aún existe una mínima y muy difícil posibilidad de salvación, Pellicer ha decidido tener un buen gesto con el Atlético Malagueño.
En la citada comparecencia ante los medios, el entrenador del Málaga adelantó que no tocaría en exceso al equipo que dirige Juan Francisco Funes. Al ser cuestionado por los futbolistas disponibles para el partido ante el Mirandés, Pellicer adelantó el buen gesto que tendrá con el Malagueño: "Creo que estarán todos excepto Ramón. Pablo se entrenó con normalidad, pero Calvo y Luis han salido al final de la sesión. Toda la plantilla o casi. Los del filial me gustaría poder tener alguno más, pero están jugándose también lo suyo".
Y es que el segundo equipo malaguista disputa el próximo domingo un duelo trascendental ante El Palo en la lucha por ascender a la Segunda Federación. El buen hacer de los pupilos de Funes es una de las pocas alegrías que está recibiendo la castigadísima afición costasoleña.