La Sociedad Deportiva Eibar ha hecho oficial este lunes el traspaso de Cristian Gutiérrez (Marbella, 2000), que deja en las arcas del Málaga una cantidad que puede alcanzar el millón de euros si se cumplen una serie de objetivos de su contrato. El carrilero y extremo zurdo ha firmado hasta 2027.
El Málaga ha explicado vía comunicado oficial que en este traspaso se reservan un porcentaje de una futura venta que "variará en función de ciertos objetivos del jugador y posibles pagos del conjunto armero". Tras varios meses de idas y venidas con ofertas, rumores y presiones del entorno del jugador, lo cierto es que el marbellí tenía claro que quería salir a un equipo de mayor categoría. Jugará en Segunda, en el tercer intento del Eibar de regresar de nuevo a Primera División.
"El Málaga CF desea a Cristian toda la suerte en su futuro profesional y personal", reza el club en su página web. Cristian se marcha tras haber protagonizado una de las irrupciones más sorprendentes y meteóricas que se recuerdan. De no tener un rol importante en el filial del Granada llegó en 2022 a la cantera del Málaga.
Antes de que pudiera jugar con continuidad en el Atlético Malagueño, Pepe Mel confió en él, lo subió al primer equipo, lo puso sobre el verde y rindió de inmediato: en 26 partidos, 21 de ellos como titular, anotó dos goles y repartió cuatro asistencias. Se ganó ser uno de los jugadores salvados de la quema de la temporada del descenso. Ahora, menos de un año después, decide abandonar el Málaga para aprovechar este trampolín hacia el fútbol profesional.
Que le aprovechen las playas de Éibar y sus días de sol…