Ontiveros pide perdón a la afición del Málaga: "Lo voy a llevar siempre en mi corazón"

Javier Ontiveros parece haber resurgido de las cenizas en el último año de contrato que le queda en el Villarreal. En este inicio de temporada, el exmalaguista está siendo fundamental en el filial del equipo amarillo, donde suma cuatro goles y tres asistencias en nueve partidos de LALIGA Hypermotion. Aprovechando que ha recuperado la confianza para ser el jugador que pintaba ser, ha roto su silencio e incluso ha hablado de su negativa a regresar al Málaga cuando lo tenía todo firmado, un episodio que le convirtió en villano en Martiricos.

"Ellos se llevaron el mal trago porque yo tenía ganas de ir, pero también les dije que si me venía un equipo de Primera yo quería ir. Quería jugar en Primera. Todo jugador hubiera hecho lo mismo. Yo sólo puedo pedir perdón y poco más. El malaguismo se lo tomó mal, pero ojalá se pase en el futuro", ha contado en una entrevista en Relevo.

"Estarán pronto en Segunda División. Al Málaga lo voy a llevar siempre en mi corazón".

El marbellí lamenta el odio recibido en redes por parte de un sector de la afición malaguista, que se lo tomó como una traición imperdonable. "¡Ontiveros, mercenario!" ha sido el cántico más suave que ha recibido cuando ha jugado contra el Málaga, tanto en Fuenlabrada como en el Villarreal 'B'. "Me gustaría que pensaran de otra manera y no como me recibieron el año pasado. A la gente de la casa le jode que le reciban así… Este año será importante para ellos, estarán pronto en Segunda División. Al Málaga lo voy a llevar siempre en mi corazón".

El talentoso jugador había pegado un bajón físico y de rendimiento en los últimos años. En dicha entrevista incluso recuerda los comentarios que le llegaron a dedicar cuando jugó en Huesca, otro de los clubes donde jugó: "Me silbaban y me gritaban gordo".

A sus 26, llama la atención que esté en un filial: "Noté que me había acomodado". Pero Ontiveros asegura que este verano ha tenido un click y espera marcar la diferencia. "Estoy bien, pero todavía puedo dar mucho más. El momento clave fue esta pretemporada. Me machaqué mucho en verano, me mentalicé de que éste tenía que ser el año. Es mi último año de contrato, noté que me había acomodado. Y me dije: si no es este año, no sé qué pasará el que viene", cuenta el jugador que una vez fue héroe de aquel Málaga a punto de volver a Primera en 2019.