Granada - Málaga: un rival con muchas dudas y un maleficio que dura seis años

El derbi de este viernes promete ser apasionante y sin términos medios. Lo primero suele ocurrir antes del partido, pues no es una previa cualquiera la de un Granada - Málaga (20.30 horas) que volverá a tener peregrinación blanquiazul, aunque nunca será como la del récord de desplazamiento en Primera RFEF contra el filial nazarí. De aquello quedará el recuerdo, pero poco echará de menos el Málaga una categoría a la que no quiere regresar ni en pintura por muy buenos momento que le haya dado.

El Málaga llega caminando con paso firme ante un Granada que viene tambaleándose desde que comenzó la temporada en Segunda, donde no parece adaptarse pese a su plantilla de grandes quilates. Jugadores como Uzuni, Reinier, Gonzalo Villar, Weissman, Manu Trigueros o Tsitaishvili que no están encajando en el ecosistema del técnico sevillano Guille Abascal, muy señalado por la falta de autocrítica y la ausencia de ideas para cambiar la dinámica de un equipo que está sufriendo en demasía, sobre todo en defensa.

En cinco partidos, el Granada lleva dos derrotas -en casa-, dos empates y una victoria con ocho goles encajados y seis a favor. En el único encuentro donde dejaron su portería a cero lograron la victoria, que fue ante el Racing de Ferrol en A Malata por 0-1, con gol de Ricard Sánchez.

El equipo granadino está herido, inmerso en un mar de dudas y con la presión del entorno en aumento, una situación que empuja al Málaga a tener más concentración si cabe. Un rival que juega casa, con esta necesidad de ganar y convencer, lo puede hacer doblemente peligroso.

Los Cármenes, plaza incómoda

Los alicientes sobran para el Málaga, que llega en séptima posición con nueve puntos de quince y que, al jugar el primer partido de la jornada este viernes, si gana podría irse a dormir como líder de Segunda División. Anecdótico, pero ilustrativo del buen comienzo del equipo de Pellicer, con paralelismos con el Málaga de 1998 con Joaquín Peiró en el banquillo.

Sin embargo, los datos del Málaga en Los Cármenes están más pegados al pesimismo. De las once veces que ha jugado en Granada, solo ha ganado en una ocasión y fue en la temporada 2016/17 en Primera, en un 0-2 resuelto con un doblete de Sandro Ramírez. Desde entonces han pasado seis años, con derrotas en 2019 (1-0) y en 2023 (1-0), ambas en Segunda. En el global, dos empates y ocho derrotas. Una tendencia que quiere empezar a cambiar este viernes el conjunto de Pellicer.

Se da la circunstancia de que el Granada todavía no sabe lo que es ganar en casa esta temporada. De hecho, ninguno de los recién ascendidos lo ha conseguido, tampoco Cádiz y Almería. Los nazaríes llevan dos derrotas y un empate. Cayeron en el debut por 1-2 siendo remontados por el Albacete del malagueño Alberto González; con dureza por 1-3 contra el Huesca (ambos rivales fueron derrotados por el Málaga) y empataron a uno ante el Dépor.