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El Málaga empieza a ser David Larrubia y diez más

Larrubia, en una entrevista con ElDesmarque a principio de temporada.
Periodista malagueño. Delegado en Málaga.

"Los pelos de punta", resumía David Larrubia, el chico que ha pasado de recogepelotas a promesa, de promesa a canterano, y de ahí a jugador que sale ovacionado por 24.000 personas en La Rosaleda. Ocurrió un día más, este sábado noche ante el Cartagena. "Para mí jugar en el Málaga no es jugar en un equipo cualquiera. Vestir esta camiseta es un privilegio y un orgullo, estoy orgulloso de mí mismo", dijo tras el 1-0 donde volvió a ser el mejor de su equipo, un MVP compartido junto al mariscal Nelson Monte.

Larru, como lo llaman sus compañeros de puertas hacia dentro, está siendo el más destacado de las últimas semanas. Fue el líder del triunfo en La Rosaleda ante el Eibar con gol suyo (1-0), dio la cara, marcó el 3-2 y aceleró al equipo en la caída estrepitosa en Copa ante el Estepona y este sábado, en otra titularidad acompañada de victoria, volvió a demostrar que cada vez fluye más en el campo, su confianza aumenta y la calidad viene acompañada de aciertos, además de sus esfuerzos extra para recuperar balones, sin parar de correr en ningún momento.

Pellicer lo puso ante el Cartagena en una posición distinta a la que ocupa con normalidad, sino más por dentro, como mediapunta, una zona de influencia donde encaja por su estilo. Aunque termina buscando la línea de cal, pegado a la banda de Jokin Gabilondo y percutiendo por ahí para centrar, pero su jugada fetiche es romper por dentro y buscar centro o disparo. Jugó 87 minutos a un nivel altísimo. No es casualidad que cientos de malaguistas se pusieran en pie para aplaudirle: levantar del asiento a un hincha no es cosa banal.

Aún le falta ese puntito de precisión en sus disparos y una mejora en la toma de decisiones, donde tiene aún un margen enorme. Pero progresa a pasos más acelerados y firmes. Lo reconocía él mismo en rueda de prensa: "Me he visto súper bien, es verdad que me sigue faltando esa toma de decisión en los últimos metros. El trabajo defensivo tampoco me falta, así que muy contento". Además, tocando madera, las lesiones musculares le están respetando y está teniendo continuidad.

Está en el camino que predijo

Larrubia fue el primero que inició la ronda de entrevistas de ElDesmarque en esta temporada. Dejó una interesante reflexión sobre lo que esperaba de su progresión como futbolista tras el ascenso a Segunda.

P - ¿Qué expectativas tiene para esta temporada en Segunda?

R: Creo que la categoría me va a ayudar a desarrollar mi fútbol. En Segunda puedo hacer las cosas que sé hacer mucho mejor. Puedo ser más decisivo. Lo he hablado con el míster, que confía mucho en mí. Puedo dar un salto de nivel.

P - ¿Piensa que a los jóvenes les puede venir grande el salto de categoría?

R: Yo creo que no, tenemos la suficiente capacidad para dar ese salto. Si Pellicer, Loren y todo el club ha confiado en nosotros es porque ven que estamos preparados. Yo me veo bastante preparado.


Esto lo dijo antes del debut en Ferrol. Este domingo, tras una de sus mejores actuaciones, dijo: "Estoy en el camino. Mi evolución como futbolista está siendo despacio, pero con buena letra. Cada partido voy cogiendo más confianza en los aspectos del juego y voy ganando experiencia en Segunda".

Está con flow, está con ganas de poner su talento al servicio del equipo. El once inicial del Málaga, a 10 de noviembre, empieza a ser David Larrubia y diez más, salvo que Sergio Pellicer, asiduo a las rotaciones y vigilante del día a día, diga lo contrario.

David Larrubia, ante el Cartagena en La Rosaleda. (Foto: MCF)

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