Pellicer pide calma con Chupete, comodín de la delantera: "En otro contexto hubiese jugado más"

El Málaga ha comenzado el año mirando de reojo y con calma alguna oportunidad de mercado para reforzar la delantera, pero hay en la casa un chaval llamado Carlos Ruiz Rubio, más conocido como 'Chupete', que sigue tocando a la puerta del primer equipo, con el que ya debutó en Los Cármenes en los minutos finales del derbi ante el Granada. 

El canterano sigue marcando goles a pares en Tercera RFEF y su nombre sigue resonando como ocurría antaño con Loren Zúñiga. El caso del ahora delantero de la cantera del Real Madrid es un ejemplo perfecto de que no siempre las prisas son buenas consejeras y este tipo de saltos de categoría son inmensos. Se marchó del Málaga sin marcar con el primer equipo en partido oficial.

El malaguismo pide de vez en cuando una oportunidad para Chupete, sobre todo cuando Sergio Castel sigue sin rendir lo esperado y a Baturina se le iba resistiendo el gol hasta el último episodio del año en Gijón. Dioni, con sus picos de forma, ha sido el goleador con más peso del equipo, pero la delantera ha sido el eslabón más débil del equipo. Por eso, es inevitable mirar abajo y ver cómo Chupe lleva 17 goles en 14 partidos con el Atlético Malagueño. Es el máximo goleador de todos los grupos de Tercera RFEF, pero apenas ha tenido participación con los grandes.

"También debes saber que si pones a un jugador y sale mal… lo matas. Chupete está dando sus pasos. Poco a poco", argumenta Pellicer

Pellicer y un plan con Chupete

"Si lo necesitamos, tiraremos de él", dijo este jueves Pellicer sobre el delantero cordobés de 20 años. La prioridad es que siga siendo el estandarte del Atlético Malagueño de Juanfran Funes, que este año tiene el reto de ascender a Segunda RFEF tras varios años fallando en le intento. Son líderes del grupo noveno de Tercera RFEF con 39 puntos, empatados con el Real Jaén, que visita la ciudad deportiva malacitana precisamente este domingo (18.00 horas). Ahí deberá estar Chupete, fundamental para el filial.

"Quizá en otra situación del filial hubiera jugado más partidos por el rendimiento que está dando, pero también tengo a Dioni, Baturina y Castel que lo están haciendo bien", analizó Pellicer sobre el porqué de su poca incidencia en el primer equipo.

"Esto no puede ser gestionado con un calentón, es más una partida de ajedrez. También debes saber que si pones a un jugador y sale mal… al jugador lo matas. Chupete está dando sus pasos. Poco a poco. El domingo va a estar con el filial y quizá vaya convocado. Estamos atentos a su evolución y a la de otros jugadores de la cantera", añadió.

Los planes con Chupete son claros: no precipitarse aún porque tendrá su momento. "Hay que medir muchísimo los tiempos. Hay que saber interpretar el momento y el contexto de cada jugador. Sabéis que soy un amante de subir a los chavales. En la temporada de las 18 fichas siempre teníamos que tirar del filial. Este año el filial tiene un objetivo de formación para subir de categoría y acercarse al primer equipo", expuso como argumento. Chupete, de momento, debe conformarse con ser cabeza de ratón en el Atlético Malagueño en lugar de cola de león en el primer equipo.

Ratón de área y gran finalizador

Chupe es un delantero en estado de gracia que está demostrando sus cualidades como delantero de área, con gran olfato para atacar los centros y también muy peligroso al espacio. Es potente y tiene un manejo estupendo de las dos piernas. Es diestro, aunque capaz de definir con la zurda en una abanico de remates muy amplio. Ha marcado goles de todos los colores: llegando al primer o segundo palo, en transición, de espaldas y definiendo en espacios reducidos... Es el pichichi de una Tercera RFEF que se le está quedando pequeña.

Su mote no es casualidad. De pequeño se rapaba igual que el delantero chileno Humberto ‘Chupete’ Suazo, ex del Real Zaragoza, de ahí que su padre le pusiera un mote que ya iba ligado al gol. Fue la leyenda malaguista Duda quien lo fichó para el Málaga cuando era director de cantera.

No hay tantos casos como Cordero, Ochoa o Izan, adolescentes preparados para el fútbol profesional, pero que han tenido su proceso, alguno con irrupciones más tardías. Más complicado aún es para los delanteros, que tanto viven del gol. No cualquier chaval está preparado para rendir en Segunda División, un fútbol con tres escalones más de diferencia. Veremos cuándo se abre esa ventana para Chupete y si es capaz de estar inspirado para convencer a Pellicer, que nunca mira el DNI para sus alineaciones.