Lamine Yamal es el jugador de moda en el Barça y prácticamente en el panorama mundial. Su irrupción ha recordado a la de Ansu Fati en su día, y no ha tardado en convertirse en uno de los ídolos de la afición culé. Xavi Hernández sabe que tiene una joya entre manos, y por ello se está encargando de darle la confianza necesaria para que explote todas las virtudes que atesora, y se convierta en uno de los mejores jugadores del planeta a corto plazo.
Tiene todo lo necesario para triunfar, y con apenas 16 años, ha logrado desbancar a compañeros mucho más experimentados como Ferran Torres o Raphinha, pese a que en el Camp Nou pagaron un pastizal por ambos. Su buen desempeño también le sirvió para que Luis de la Fuente decidiera convocarle con la selección española absoluta, y le hiciera debutar en el encuentro contra Georgia, donde solamente necesitó de unos pocos minutos para ver portería.
Joan Laporta es consciente de que el interés que ha suscitado el delantero hispano-marroquí es enorme, y hay conjuntos que tienen su nombre anotado en la lista de prioridades. Y la preocupación debe de haber aumentado notablemente tras revelarse la información que ha filtrado el diario ‘AS’, donde explica que el padre del prometedor futbolista no lo pondrá sencillo para la continuidad de su hijo durante otra campaña más.
Solicitará una renovación al alza, y pasar a tener ficha y dorsal del primer equipo. Aprovechando el tirón mediático de Lamine, pedirá mucho dinero para firmar un nuevo vínculo, y en caso de que no acepten las peticiones que realizará él y Jorge Mendes, el representante de Yamal, amenaza con llevárselo del Barça. De hecho, presiona con dos escuadras con las que existe una rivalidad dantesca, y que se han fijado en el ‘nuevo Leo Messi’.
Hablamos del Real Madrid y del Paris Saint-Germain, que no le quitan el ojo de encima. Laporta no puede permitirse la huida del nuevo niño bonito de La Masía.