El Real Madrid está satisfecho con la aportación ofensiva de sus jugadores, aunque todavía hay un considerable margen de mejora, lógicamente. Pero Florentino Pérez está convencido de que tiene un ataque temible, pese a no haber firmado a un sustituto a la altura de Karim Benzema, algo que tiene previsto hacer en 2024, cuando previsiblemente llegará Kylian Mbappé. Aún y así, con Jude Bellingham y Vinicius Junior, es más que suficiente.
A ellos, también hay que sumar a Joselu Mato, a Fede Valverde y a Rodrygo Goes. La realidad es que el acierto de cara a puerta no está suponiendo ningún problema por ahora, en cambio, lo que más preocupación genera a Carlo Ancelotti es el hecho de encajar goles con tanta facilidad. Están acusando las lesiones de larga duración de Thibaut Courtois y de Eder Militao, y rara vez consiguen dejar la portería a cero, lo que supone un dolor de cabeza.
Por ello, el presidente tiene planeado hacer cambios en la zaga. En ambos laterales, ya se ha hablado mucho de Alphonso Davies y de Reece James, que son objetivos prioritarios en el Santiago Bernabéu. Y también desean fichar a un central de garantías, viendo la avanzada edad de Antonio Rüdiger, de David Alaba y de Nacho Fernández, quien tiene un pie y medio fuera. Así que han comenzado a vigilar atentamente la situación de William Saliba.
Florentino Pérez solamente fichará a estrellas, y a cracks que mejoren lo que ya hay en el vestuario, de manera que no está dispuesto a traer a futbolistas que sean un melón por abrir. Resulta entendible, por lo tanto, que haya pensado en el defensor del Arsenal, quien ahora mismo es considerado como uno de los futbolistas más en forma del planeta en su puesto. De hecho, hace un par de semanas fue capaz de secar por completo a Erling Braut Haaland.
Tiene 22 años, y un valor de mercado de 70 millones de euros. Pero eso no es un impedimento para que el Madrid lo tenga en la mira, como han contado en ‘The Sun’.