Luka Modric no encuentra su sitio en el Real Madrid. Aunque el futbolista croata ama al club blanco, su escaso protagonismo ha cambiado su intención de cumplir la renovación que firmó este verano hasta 2024. Un plazo que no está dispuesto a cumplir y que ya ha trasladado a Florentino Pérez. El destino que parece más probable es el de Arabia Saudí dado las cifras tentadoras en lo que sería su último contrato antes de retirarse del fútbol profesional. Sin embargo, los plazos los ha marcado el club blanco para calmar la tempestad.
Con doce temporadas en el Real Madrid a sus espaldas, el mediocampista no quiere ver como se va apagando su figura en el banquillo del Santiago Bernabéu, donde ha pasado de ser titular y referencia a ser el decimoquinto futbolista con menos minutos (414). Rechazó la oferta millonaria de los equipos saudíes en septiembre por fidelidad a los merengues y ahora su intención es salir el próximo mes de enero, un objetivo que no comparte el club blanco.
El Real Madrid no tiene ninguna intención de perder un jugador como él a mitad de temporada, dejando ir a una leyenda por la puerta de atrás y enfadado con Florentino. Por ello, José Ángel Sánchez ha cerrado públicamente la puerta a Arabia, al menos, en invierno.
El director deportivo del club merengue acudió a la asamblea de LaLiga y, además de protagonizar un entrañable abrazo con Joan Laporta, habló para el medio saudí Goal Arabia sobre el futuro del croata: "No tenemos intención de venderlo en este momento ni tenemos negociaciones abiertas con la Liga de Arabia Saudí para una posible salida en enero", afirmaba Ángel Sánchez tras los rumores de un posible acuerdo de traspaso.
Arabia Saudí no tiene intención de abandonar su deseo de fichar a Luka ni el conjunto merengue quiere se marche en enero. La palabra y la decisión recae en Modric: cumplir su contrato y aceptar un rol secundario o forzar su salida.